Jorge Jesús rechaza el ofrecimiento de un sevillista y da prioridad a William Carvalho

Con Antonio Cordón centrado en acabar de firmar al central que sustituya a Mandi en el centro de la defensa, la dirección deportiva del Betis ha bajado ligeramente el pie del acelerador en lo que a la planificación deportiva de la 21/22 se refiere, tras unas primeras semanas de junio en la que el ritmo de incorporaciones y renovaciones ha sido realmente alto.

El Betis, de hecho, ha sido la excepción que cumple la regla en un mercado determinado por la disputa de la Eurocopa y la Copa América, lo que unido a la crisis del covid-19 tiene a todos los clubes muy parados hasta la fecha.

Y para volver a poner la velocidad de crucero, en Heliópolis requieren realizar una venta importante con la que obtener mayor liquidez, siendo el portugués William Carvalho una de las prioridades del área deportiva a la hora de dar salida. Sin embargo, no se antoja del todo sencillo, especialmente una vez que su protagonismo con Portugal en la Eurocopa se esté viendo reducido con el paso de los partidos.

La tabla de salvación de los verdiblancos, sin embargo, podría ser el Benfica de Jorge Jesús, quien lo ha solicitado expresamente. De hecho, el técnico luso lo conoce muy bien, pues ya lo tuvo bajo sus órdenes en el Sporting de Portugal. Tal es el interés de Jorge Jesús en Carvalho que, tal y como ha podido conocer ESTADIO Deportivo, ha rechazado ya algunas opciones para reforzar su centro del campo; la mayoría, más baratas. Entre ellas la de un sevillista, Amadou. El francocamerunés, al que le queda un último año de contrato con el Sevilla FC, estaba sobre la mesa del conjunto benfiquista, que no lo veía con malos ojos. Sin embargo, ha sido su técnico, finalmente, el que ha acabado descartando la posibilidad, dándole prioridad absoluta al interés en el bético William Carvalho.

El Benfica ya intentó hacerse con los servicios del pivote del Betis en el último mercado invernal. En aquella ocasión, el club luso planteó una cesión con opción de compra que no contentó al Betis, pues su intención era recuperar los 20 millones de euros (16 fijos más variables) invertidos en su día por el 80% del pase. Una intención que a día de hoy no ha cambiado demasiado en el seno de la entidad heliopolitana, a pesar de ser conocedores de la dificultad que ello conlleva.