Ahora sí, ahora no, en 2021
el protagonismo de Ibrahim Amadou, cedido al Angers francés por el Sevilla hasta junio,
ha entrado en una fase de 'dientes de sierra' con subidas y bajadas que
llegaron a preocupar en Nervión, sobre todo en el arranque del año hasta que llegó marzo. Volvió de una lesión el dia de Reyes y le costó asentarse de nuevo en el once del equipo blanquinegro.
Un retroceso que perjudicaba seriamente a los intereses nervionenses después de que antes de caer lesionado fuera
titular indiscutible para el técnico Stéphane Moulin, si bien
la situación parece haber cambiado de nuevo para el camerunés, de nuevo protagonista en su equipo en marzo.
De hecho, después de que en el último partido de febrero sólo disputara 14 minutos,
en los tres de la Ligue 1 del presente mes lo ha jugado absolutamente todo, a lo que hay que sumar 78' en la Copa de Francia. Además,
el pivote cedido por el Sevilla ha realizado buenas actuaciones, como refleja que el Angers sólo ha recibido un gol en los cuatro duelos dirimidos, lo que también tiene que ver con su labor en la contención.
Esta reacción llega en un momento importante para el Sevilla, con el final de la temporada cada vez más cerca, siendo fundamental que
Amadou deje un buen sabor de boca para que resulte más sencillo venderle en verano y obtener algún rédito por un futboloista que costó 15 millones. Obviamente, la cantidad no será considerable y más acabando en 2022, pero una buena recta final podría suponer que aportara algo a la caja.