La
configuración de la portería sevillista de cara a la 21/22 está bastante clara. Después de tres campañas en Nervión, y condicionado por la lesión que sufrió en la recta final de la pasada temporada que le hizo perder la titularidad,
Tomas Vaclik, que arrastra actualmente una nueva lesión, dirá adiós en verano al Sevilla FC. En su lugar, como ya avanzó
ESTADIO,
Monchi ya tiene cerrada la contratación, como agente libre, de Marko Dmitrovic, que no renovará con el Eibar.
Con la llegada del serbio,
el conjunto nervionense tendrá un meta que mete penaltis y otro que los para. Y es que,
Bono, con sus paradas a Fekir en el derbi y a Joselu ante el Alavés, se está revelando como un auténtico especialista en las penas máximas,
algo que en el Sevilla FC no se conocía desde la época de Palop.Pero al igual que el marroquí,
el Sevilla Atlético también tiene bajo palos un ‘parapenaltis’ consumado. A sus 20 años,
Alfonso Pastor es el último exponente de la buena salida de la portería canterana del Sevilla FC en el siglo XXI, siendo decisivo en las dos últimas victorias del filial el Segunda B.
La pasada jornada, en La Condomina, el cordobés detenía un lanzamiento de Espina desde los once metros con 0-0 en el marcador y, aunque más tarde no pudo hacer lo mismo con una nueva pena máxima ejecutada por el mismo jugador, contribuyó de manera decisiva al
triunfo por 2-3 de su equipo ante el UCAM Murcia.Pero ahí no quedó la cosa, pues este mismo domingo,
ante el Recreativo Granada, ha vuelto a ser providencial al atajar el lanzamiento de Miguel Martín tras un derribo de Kibamba en el área con 1-0 en el marcador, posibilitando así la victoria final del filial por 2-0.
Alfonso ya sabe lo que es
debutar con el primer equipo. Le llegó casi de imprevisto en el encuentro
ante el Chelsea de la fase de grupos de la Champions, por las molestias a última hora de Vaclik. Entonces, también le lanzaron un penalti, pero no pudo hacer nada para evitar el cuarto tanto de Giroud, que le amargó un estreno en el que pese a todo dejó
más de una parada de mérito.Su nombre, de hecho, está
en la agenda de grandes clubes como el Liverpool o el Real Madrid, que ha pensando en él para el Castilla. Y lo cierto es que a día de hoy, el cancerbero natural de Bujalance, que cumple su sexta temporada en el club sevillista, al que llegó en edad infantil para enrolarse en primer lugar en el Altair,
es libre para negociar con cualquier club al acabar contrato el 30 de junio. Y con la portería del primer equipo copada, su futuro está en el aire. Una situación parecida, por ejemplo, a la de
Zarzana, que tampoco ha renovado y no aparece por las alineaciones de Gallardo desde el pasado Día de Reyes, en el derbi chico.