A buen seguro que el del
Sevilla FC no ha sido el comienzo esperado por plantilla, directiva y afición, pero lo cierto es que el conjunto de
Julen Lopetegui sólo suma siete puntos de 18 posibles en los seis primeros partidos de
LaLiga. Aunque conste con dos duelos de menos en su casillero, las previsiones eran las de estar mucho más arriba que la décimosexta plaza que ocupa actualmente los nervionenses. Las tres derrotas consecutivas en
LaLiga suponene la peor racha de
Lopetegui al frente de la plantilla sevillista, lo que ha encendido las alarmas en el seno de la entidad de Eduardo Dato.
Sea como fuere,
el núcleo duro de la directiva y la dirección deportiva se dejó ver en el entrenamiento del pasado, dando buena muestra de la confianza que hay en la plantilla pero a la vez dando un toque de atención para revertir la situación cuanto antes.
Y es que esta situación era algo que llevaba tiempo sin vivirse por Nervión, concretamente desde hace cinco años, cuando el inquilino del banquillo era
Unai Emery. El ahora técnico vasco del Villarreal comenzó la temporada 2015/2016 con sólo
cinco puntos en las seis primeras jornadas en un Sevilla que finalmente acabaría en la séptima posición en LaLiga y levantando su tercera Europa League consecutiva en la final de Basilea frente al
Liverpool.
Lo que bien empieza no siempre bien acaba
En la temporada 2017/2018 el
Sevilla FC entonces dirigido por
Berizzo comenzó sumando 13 de 18 puntos aunque la temporada acabó con Caparrós en el banquillo previo paso de
Vincenzo Montella. Lo curioso es que éste fue el mejor comienzo del Sevilla en los últimos cinco años. Pues con
Sampaoli (16/17) el Sevilla logró 11 de 18 en las seis primeras jornadas, así como
Machín (18/19) y el propio
Lopetegui la temporada pasada sumaron diez de 18.