El
mediocentro del Real Oviedo, Giorgi Aburjania, destacó en su presentación su predilección por el club azul "antes incluso" de que la dirección deportiva contactara con él, y reconoció que
"lo ilusionante del proyecto" y sus ganas de volver a una Segunda donde cree que puede "hacer las cosas bien", hicieron el resto.
El georgiano ve la Segunda División "cada vez más complicada y competitiva" y tras su
experiencia en la primera holandesa, en las filas del Twente, tanto él como su familia decidieron volver al fútbol español.
El nuevo fichaje azul, al que
le encantaría poder estar disponible ya para esta misma jornada ante el Espanyol, admitió haber visto no solo los dos partidos de liga de su nuevo equipo sino también el último amistoso ante el Athletic, partidos en los que vio a
un Oviedo "con las ideas muy claras".
"El Real Oviedo es un club muy grande, que hace las cosas bien, y yo ya
tenía claro que quería venir aquí antes de la llamada de Arnau", comentó el propio jugador, que compartió vestuario con Mossa y Tejera en el Nástic y sabía por ellos "maravillas tanto del club como de la afición".
El propio director deportivo carbayón, Francesc Arnau, manifestó que con su llegada el cuerpo técnico tendrá la opción de disponer trivote si lo necesita, ya que
el internacional georgiano puede jugar tanto de '6' -como hace en su selección- como de mediocentro organizador, y también incluso casi como un '10', más adelantado.
El futbolista, que será azul esta campaña con opción a otra, llega traspasado gracias a
una operación con el Sevilla FC -club que lo tenía en propiedad- que se cerró
con el pago por parte del club "de una pequeña cantidad, pero insignificante", tal y como aclaró el propio Arnau.
Aburjania, que reconoció estar
"bien físicamente" tras trabajar en Holanda desde junio y haberse ejercitado estos días en solitario, está a la espera de un segundo test negativo para incorporarse a los entrenamientos grupales, resultado que podría llegar en las próximas horas.
Estadio Deportivo3 min lectura