El de
Óscar Rodríguez es -por supuesto, después de los de Messi y Bartomeu- el nombre más escuchado en las últimas horas. El mediapunta de 22 años se ha convertido en el segundo refuerzo para la presente temporada del
Sevilla FC, que ha abonado 13,5 millones de euros al
Real Madrid por el flamante
internacional absoluto con la selección española, quien en esta 20/21 también se estrenará en competición europea y en la
Champions League vistiendo la camiseta blanquirroja.
Estos detalles demuestran la
enorme proyección del atacante, que tendrá
una cláusula de rescisión a la altura del potencial que se espera de él. Óscar ha firmado un contrato para las
cinco próximas temporadas y el Real Madrid se ha reservado un
derecho de tanteo sobre él -que no opción de recompra-. Es decir, que los merengues podrán recuperar a su canterano si igualan la oferta más alta que tenga el Sevilla, que no se va a contentar con cualquier cifra.
La intención del club es
que Óscar eche raíces en Nervión y, para ello, quiere ahuyentar a posibles pretendientes con una
cláusula de 80 millones de euros, según la información que adelanta en su cuenta de Twitter el periodista José Manuel García (
@butacondelgarci). Se trata de un
blindaje aún mayor del que tienen otros 'cracks' del hexacampeón de Europa, como Lucas
Ocampos,
Diego Carlos Santos y Jules
Koundé, todos ellos fichajes del pasado verano.
Tanto el extremo argentino, máximo goleador sevillista en la 19/20 con 17 dianas, como la pareja de centrales de moda en Europa, formada por el brasileño y por el nuevo internacional sub 21 francés,
tienen un precio de salida de 75 millones de euros, una tasación lo suficientemente alta como para
mantener a raya a la pléyade de pretendientes que manejan, entre los que se encuentran clubes del prestigio de Real Madrid, Barcelona, Liverpoool, Manchester City, United, Arsenal, Bayern de Múnich, PSG...
No obstante,
la cláusula más alta de la actual plantilla del Sevilla FC no la tienen ni el recién llegado Óscar Rodríguez ni tampoco los tres refuerzos más mediáticos del pasado curso, sino un jugador que llegó en enero de 2019 por el módico precio de un millón de euros seis meses antes de quedar libre:
Munir El Haddadi. La libertad del atacante hispano-marroquí, con contrato en vigor hasta 2023, está cifrada en
90 millones de euros.
El Sevilla ha aprendido la lección después de ser incapaz de retener a jugadores como Clement Lenglet o Vitolo Machín, que se fueron por los cerca de 40 millones de sus cláusulas. Esa barrera de las cuatro decenas sólo las ha superado Dani Alves (gracias a los múltiples variables incluidos en su traspaso). También se acercó a esa cifra Wissan Ben Yedder y algunos peldaños por debajo se quedaron otras de sus estrellas recientes como Kévin Gameiro, Carlos Bacca, Steven N'Zonzi o Gregorz Krychowiak, por poner sólo algunos ejemplos.
Las cualidades de Óscar Rodríguez le convierten en un
interesante jugador de presente y futuro. Es un
especialista tanto a balón parado como a larga distancia que ha presentado esta temporada cifras espectaculares. No en vano, el de Talavera de la Reina
únicamente ha sido superado por el todopoderoso Messi y no sólo en el campeonato español sino en el conjunto de las cinco grandes ligas europeas.
El ex del Leganés ha marcado
seis goles desde fuera del área y se sitúa como el mejor francotirador del Viejo Continente tras Messi, con nueve. Asimismo, ha convertido este curso
en gol cinco lanzamientos de falta, sólo uno menos que el astro argentino. Unos números espectaculares a los que suma una enorme ilusión,
como demostró con sus primeras palabras como sevillista, por dar un salto en su carrera con uno de los mejores trampolines que hay en Europa: el de Lopetegui... y Monchi.