Lucas Ocampos es uno de los protagonistas absolutos del fútbol europeo en esta interminable temporada 2019/2020. Y lo es por varios motivos, primero, por su
espectacular rendimiento en su primera temporada en el
Sevilla FC y, el segundo, por la
rentabilidad que el club nervionense está sacando (y sacará) a los
15 millones de euros que pagó al
Olympique de Marsella. Ahora, sólo un año después,
toda Europa tiene
echando humo a las bases de datos en busca del nuevo Ocampos; mientras el Sevilla, concentrado en volver a abrazar la gloria continental, se aferra al auténtico.
Los pentacampeones de la
Europa League realizaron este miércoles su último entrenamiento en su lugar de concentración en Düsseldorf (Alemania), antes de viajar a
Colonia para enfrentarse el viernes al
Inter de Milán. En la sesión volvió a verse con el grupo al extremo argentino, que fue sustituido por
molestias en la rodilla derecha en la segunda parte del choque frente al United y, aunque en determinadas acciones siente dolor en la zona,
en principio podrá jugar la final.
El de Quilmes no quiere perderse una final en la que ya cayó
derrotado hace dos años con el OM ante el Atlético de Madrid y
hará todo lo posible por volver a ser de la partida, tras ser
protagonista del pase a semifinales con su gol en cuartos ante el
Wolverhampton inglés (1-0), el primero que consigue en Europa como sevillista y
el número 17 (14 en LaLiga y dos en Copa del Rey) de lo que va de una temporada en la que es, destacadamente, el máximo goleador de su equipo.
El club está
tranquilo con respecto a su futuro y al poderío económico de los clubes con los que Ocampos ha sido relacionado (Madrid, Atlético, Bayern, Liverpool...), después de que el internacional absoluto con Argentina haya
remarcado en varias comparecencias recientes su intención de seguir al menos
un año más en el Sevilla, para continuar creciendo en una liga top como la española y jugar la
Champions League.
Si alguien lo quiere, Monchi ya ha dejado claro que
su salida no se contempla, ni se contemplará, por una cifra inferior a los
70-75 millones de euros. Es decir, sólo aceptaría desprenderse de una de las piezas decisivas en el preciso engranaje de Lopetegui si el club comprador deja en las arcas del Sánchez-Pizjuán
una plusvalía que ronde los 60 millones. Que se dice pronto.
Normal que las cada día más recurrentes bases de datos -el
Big Data, la
Inteligencia Artificial...- se afanen en
encontrar al próximo Ocampos, un jugador muy codiciado por lo completo que le hacen sus características. Además de
goles y asistencias, aporta capacidad de
desborde, una letal
zancada para correr al espacio libre,
juego aéreo y un carácter indomable que le hace ir al cien por cien en todas las jugadas, liderando la
presión alta,
recuperando en campo contrario, además de mostrar
compromiso en los balones divididos y en las
ayudas a su lateral.
En base a esas características que definen al jugador del Sevilla, de
26 años y 1,83 metros, la base de datos del portal
ProFootballDB aporta tres nombres de futbolistas, desconocidos para muchos, que podrían aportar unas cualidades similares a las de Ocampos por mucho menos precio en el mercado:
León Bailey, del Bayern Leverkusen alemán;
Oussama Idrissi, del Az Alkmaar holandés; y
Bruno Henrique, del Flamengo brasileño.
El citado portal especializado le da a
Bailey (23 años y 1,81 m.) un
89 por ciento de similitud con Ocampos. El jaimacano, que también puede jugar como atacante por ambas bandas, ha jugado esta temporada
33 partidos y ha acabado con
siete goles y tres asistencias para el Leverkusen, club que le fichó hace tres años del Genk por unos
13 millones de euros, que es el valor de mercado que le otorga Transfermarkt. Con contrato en el Bayer hasta 2023.
Otro 89 por ciento de coincidencia con Ocampos tiene
Idrissi (24 años y 1,83). Nacido en Holanda pero internacional con Marruecos, su país de ascendencia, también puede actuar como extremos por los dos costados y es fijo en Az, que lo contrató en el mercado invernal de 2018 del Groningen por
sólo 2 millones de euros.
Tasado en 12 kilos y contrato hasta 2022, este curso ha disputado 25 encuentros, con
13 tantos marcados y otros cinco regalados.
Algo menos similar, un
86 por ciento, es el tercero de los candidatos, el más mayor de todos.
Bruno Henrique (1,84 m.) tiene ya 29 años (tres más que Ocampos), pero también brilla en las alas del ataque del Flamengo, con el que la última campaña celebró
21 dianas y cinco asistencias y en los tres partidos de la actual Serie A de Brasil lleva ya un gol. Su valor de mercado, según los especialistas, es de
5 millones; uno más de lo que pagó el 'Menao' al Santos en enero de 2019, cuando le ató hasta 2023.