El parón provocado por la pandemia del coronavirus no ha detenido ni mucho menos el trabajo de la dirección deportiva del
Sevilla FC. A estas alturas, los objetivos de cara a la próxima campaña están más que definidos. El siguiente paso, tras un gran análisis del mercado y de las necesidades del equipo, es reducir el número de candidatos para cada posición.
Y en esas anda enfrascado
Monchi, que tiene entre sus prioridades el fichaje de un lateral derecho que compita con Jesús Navas, que sólo cuenta en estos momentos con Koundé como posible relevo tras la salida en el pasado mercado invernal del canterano
Pozo, cedido en el Mallorca. Así pues, uno de los nombres que viene sonando con más fuerza en los últimos días es el del francés
Bouna Sarr, del Olympique de Marsella, que podría salir por unos 10 millones de euros. Pero no es el único.
Desde Italia han vuelto a vincular a
Florenzi, que volverá a la Roma tras su préstamo en el Valencia para volver a salir, y ayer se apuntaba otra alternativa:
Timothy Castagne, quien suma dos goles y dos asistencias este curso en 19 partidos con el
Atalanta. Así lo asegura ‘areanapoli.it’, donde se indica que el lateral diestro belga, de 24 años y con contrato en vigor hasta 2021, está también en el punto de mira de un activo
Nápoles, que igualmente sería rival por Maxime López.
El club partenopeo, en realidad, busca reforzar sus dos laterales y para el derecho negocia con
Davide Faraoni, del Hellas Verona, pero las opciones que maneja para la izquierda se antojan demasiado caras: Robin Gosens, también del Atalanta, y cuyo traspaso podría rondar los 30 kilos; y Emerson Palmieri, por el que Chelsea pagó 20 kilos y que interesa también a Juventus e Inter.
Por ello, en San Paolo consideran a
Castagne una alternativa más económica (está tasado en 16 millones por Transfermarkt), dado que el internacional belga es un futbolista ambidiestro que puede desenvolverse por ambos costados. Una polivalencia que también podría valorar Monchi.