Un alivio para Monchi

Un alivio para Monchi
Monchi tendrá un mayor margen de maniobra mientras busca una salida definitiva a sus descartes. - F. Mateos
Fernando MateosFernando Mateos 4 min lectura
La herencia con la que se encontró a su llegada supuso una importante rémora en la primera planificación de Monchi en esta su segunda etapa en Nervión. Eran muchos los jugadores con los que no contaba, pero sus altos salarios dificultó sobremanera la misión de encontrarles una salida. Tanto es así, que en lugar de obtener beneficios que poder reinvertir en fichajes, el director deportivo sevillista acabó claudicando y , fórmula a la que en sus últimos años antes de marcharse a la Roma ya era reacio, con el consiguiente coste en muchos casos para las arcas del club.

El de San Fernando, incluso, creó una figura para realizar un seguimiento de todos ellos -'loan manager'- y contrató para ello a Julien Escudé. Pero ahí no queda la cosa. El pasado 25 de septiembre, la FIFA decidió que a partir del 1 de julio de 2020 la cantidad máxima de futbolistas que un club podía tener cedidos, bien en su propia plantilla o prestados en otro equipo, sería de ocho y que se reduciría hasta seis para el inicio de la 22/23. Otro dolor de cabeza para Monchi, pues su Sevilla en la actualidad rebasa esa cifra con creces.

En concreto tiene hasta 16 jugadores a préstamo en otros clubes, doce del primer equipo -Sergio Rico (PSG), Juan Soriano, Bryan Gil, Roque Mesa y Amadou (Leganés), Kjaer (Milan), Gnagnon (Rennes), Arana (Atlético Mineiro), Corchia (Espanyol), Aleix Vidal (Alavés), Carlos Fernández (Granada)-, junto a cuatro jugadores del Sevilla Atlético: Marc Gual (Castilla), Aburjania (Twente), Cristian González (Rosario Central) y Felipe Carballo (Nacional).

De los primeros, Bryan Gil y Pozo, al ser menores de 22 años, no se verían afectados por la nueva normativa, pero aun así, el problema es evidente, pues además en la actual plantilla hay tres jugadores cedidos, que también computan, como son Suso -hasta junio de 2021-, Reguilón y Bono, que no seguirá seguro.

Todo ello, como es lógico, venía condicionando a Monchi de cara a esa planificación de la 20/21 en la que trabaja a destajo en estos días de confinamiento. Pero al menos en ese aspecto, el isleño se ha visto aliviado por el anuncio que la FIFA ha realizado esta semana.

El máximo organismo futbolístico internacional ha decidido aplazar la entrada en vigor de las restricciones relativas a la cantidad de jugadores cedidos que puede tener un equipo, sin fijar una fecha definitiva para que entre en vigor la nueva normativa, lo que otorga un mayor margen de maniobra mientras se le busca una salida definitiva a la mayoría de los jugadores que están actualmente a préstamo, pues casi ninguno tiene opciones de volver, más allá de los canteranos que podrían tener una nueva oportunidad, como es el caso de Carlos Fernández, Bryan Gil o Pozo.