El sevillista
Luuk de Jong es todo un ejemplo de la resistencia y la perseverancia tan útiles en estos días de lucha contra el
Covid-19. El delantero se ha sobrepuesto a las críticas, ha mantenido la confianza de
Julen Lopetegui y había iniciado 2020 mejorando sus cifras goleadoras, lo que le daba un rol importante en su selección de cara a la
Eurocopa. Holanda tenía bajas por lesión y el aplazamiento hasta 2021 en un hándicap para el sevillista.
"
Quería ir a la Euro con la selección más fuerte posible. Esperaba que
Memphis Depay y
Donyell Malen se pusieran en forma a tiempo para competir, pero si no era el caso, habría sido una oportunidad para mí o para otro delantero. Estaba en mi mente", ha admitido
De Jong a
PSVTV.
Con todo, el goleador nervionense no baja los brazos y
"espera poder volver a jugar cuanto antes" y estar preparado en
2021. "Ahora tenemos poco más de un año por delante, pero tengo una buena relación con el seleccionador nacional (Ronald Koeman) y espero estar en plena forma para entonces", ha agregado.
Pese a que comenzó la temporada con pobres registros de efectivas,
Lopetegui siempre le prefirió en su once inicial por delante de jugadores como
Munir, Chicharito Hernández o Munas Dabbur. Tanto es así que los dos últimos optaron por cambiar de aire en enero, en cuyo lugar llegó a Nervión
Youssef En-Nesyri, quien se ha topado con la mejor versión del holandés, que despidió 2019 con sólo dos tantos en su casillero y que en lo que va de 2020 sumaba cuatro dianas (más la que le 'robaron' en el Bernabéu) y una asistencia.