El próximo verano, Monchi tendrá que lanzarse al mercado para
reforzar todas las líneas del Sevilla FC, desde la portería hasta la delantera, comenzando a sonar nombres de jugadores que aparecen bajo el radar dl director deportivo nervionenses.
Es el caso de
Jorman Campuzano, centrocampista colombiano de 23 años que despunta en
Boca Juniors. Se trata de un pivote defensivo con buenas condiciones técnicas para sacar el balón jugado. Y aunque ese puesto e concreto parece bien cubierto en el actual plantel con
el brasileño Fernando Reges y el serbio Nemanja Gudelj, el buen hacer de Campuzano habría llamado la atención del de San Fernando.
No sería el único, sin embargo, que ha puesto sus ojos en el mediocentro, internacional ya absoluto con la selección cafetera. Según avanza TyC Sports,
Oporto, Bayer Leverkusen y Olympique de Marsella también vigilan de cerca al futbolista nacido en Tamalameque, por cuyo pase, Boca ya pagó
3,5 millones de euros en enero de 2019, procedente de Atlético Nacional de Medellín.
Desde entonces, Campuzano no ha parado de crecer, disputando en poco más de un año 27 encuentros con la camiseta 'xeneize', 13 de ellos en la presente Superliga, aunque su valor de mercado, según
Transfermarkt,
asciende de momento a 2,5 kilos.Pese a ello, en Boca son conscientes de que se trata de un jugador cuya progresión está llamando mucho la atención y saben que no será sencillo retenerle, pese a tener
contrato hasta 2023. De la mano del técnico Miguen Ángel Russo, el cafetero se ha convertido en una de las revelaciones del fútbol suramericano y ha sido pieza clave en la conquista del título por parte del bonaerense, todo ello, después de una vida complicada, en la que
ha llegado a vivir debajo de un puente y en la que se planetó dejar el fútbol para ser soldado.
"Cuando quieres un sueño, te le animas a lo que sea. Y yo me animé a cualquier dificultad, incluso
a dormir en la calle o a acostarme sin comer y solo con agua en el estómago y aguantar el hambre todo el día. Vivía así para quedarme en Bogotá y no volver a mi pueblo. Le decía a mis padres que almorzaba y era todo mentira. Es una etapa que jamás olvidaré y me sirvió para tener siempre los pies sobre la tierra. Me tocó estar en la calle, ahora estoy en la cima y tengo que ser muy humilde y sencillo con las personas”, declaró recientemente en una entrevista con La Nación.
Una capacidad de superación que le lleva a ser ambicioso, augurando incluso que irá a más. “Sé de mis cualidades y mis condiciones, y así como creo que
estoy en mi mejor momento desde que llegué, puedo dar mucho más. Todavía no han visto al mejor Campuzano”, sentenció. Por todo ello, no es de extrañar que Monchi haya puesto sus ojos en él.