No importa la naturaleza del partido, ni siquiera la entidad del rival, porque el problema que arrastra el
Sevilla se ha enquistado y lo exterioriza en cualquier escenario, incluido contra un
Bergantiños de
Tercera. La falta de pegada ha adquirido un cariz alarmante, jalonada por la nulidad de cara a puerta de los delanteros pero también por sus dificultades en la gestión de los últimos metros, para pegar cuando se acerca al área adversaria.
Ganó, sí, bajo una intensa y persistente lluvia, sí, contra un rival mucha más motivado, sí, pero lo hizo con una acción a balón parado rematada por un defensa,
Koundé, y dejando con opciones al
Bergantiños hasta la recta final al no concretar su superioridad con 'punch' con muchos millones sobre el césped de Riazor.
Así las cosas, lo más reseñable en un once tan remozado como siempre en las competiciones ajenas a
LaLiga la protagonizó
Ocampos, titular tres días antes de su reaparición liguera una vez cumplida su sanción de tres encuentros. Lopetegui quiere que llegue a la cita en
Mallorca con rodaje y lo situó en la derecha por delante de
Pozo mientras que en la izquierda apostó por
Dabbur, con tendencia al centro para abrir el carril para el
Escudero.
El guion carecía de incertidumbre por el abismo reflejado en las categorías, con los de
Lopetegui dominadores y encargados de marcar los tiempos, si bien el
Bergantiños, con la tranquilidad que otorga un margen de ganancia sin ningún contrapunto, exhibió atrevimiento y se estiró cada vez que pudo hasta el punto de evidenciar ciertos problemas nervionenses en las transiciones. Valentía que le permitió generar llegadas, si bien, obviamente, una distancia técnica tan marcada termina por relucir de una forma u otra.
El balón pertenecía principalmente a un
Sevilla que no necesitaba demasiado para encerrar a los gallegos y que, fiel a su estilo, percutía especialmente por las bandas, aunque con menos centros directos que ante el
Villarreal.
Dabbur se asociaba desde la banda para realizar diagonales mientras que en la diestra
Pozo trataba sin demasiado éxito de profundizar. No obstante, le costó crear ocasiones hasta que, en un balón parado,
Koundé adelantó a los hispalenses con un cabezazo. Es sintomático y habitual que desde atrás lleguen al rescate de los delanteros.
Chicharito dispuso de varias ocasiones pero continúa sin acierto y
Dabbur deambulaba lejos de la zona de remate y cuando se acercaba le sobraban toques. Así, las oportunidades llegaron con disparos lejanos o acciones de estrategia con
Koundé en la mayoría. Valía la inercia de la superioridad para ir ganando al descanso ante un rival sensiblemente inferior pero que no se arredraba y obligó a
Bono a intervenir en varias ocasiones.
Debía imprimir más velocidad a su propuesta para sorprender al
Bergantiños y sentenciar y, tras un comienzo de reanudación con un ritmo similar, Lopetegui decidió sentar a un
Ocampos con amarilla para dar minutos a
Rony Lopes, bullicioso cuando salió y ofreciendo una marcha más. Los nervionenses lo notaron y rápidamente rozaron el segundo con varias internadas por banda que terminaron con remates de
Dabbur, uno prácticamente sin portero que salvó un defensa sobre la línea. También la tuvo
Chicharito en un robo de
Jordán con un disparo despejado por el portero. Arreón que se difuminó para volver a la ausencia de profundidad, por lo que el técnico recurrió a
Banega en lugar de un
Óliver comprometido pero errático.
Incrementó su dominio ante un
Bergantiños vaciado aunque sin hallar una vía demasiado clara más allá de acciones aisladas como la que terminó en el palo a tiro de
Chicharito o de remates en balones parados, caso de un cabezazo de
Sergi Gómez. No existía continuidad ni ímpetu en la ofensiva sevillista y, pese al cansancio, los de
Carballo se animaron y rondaron en varias ocasiones la portería de
Bono, probando fortuna
Diego con un disparo que se marchó por poco tras jugada de Aarón. De hecho el partido concluyó en el área nervionense con una opción clamorosa para
Duque después de un nuevo fallo de
Bono, reflejo de que, más allá del cumplir el objetivo con el pase, se precisa una seria reflexión en el vestuario y más recursos para hallar la solución a un problema grave.
- Ficha técnica:
Bergantiños: Cristopher; Toni, Aarón, Iago López; Marcos Rodríguez, Agulló, Granada (Remeseiro 77'), Álex Diéguez (Duque 56'), Diego; Rivera (Yelco 64') y Cano.
Sevilla FC: Bono; Pozo, Koundé, Sergi Gómez, Escudero; Gudelj, Joan Jordán, Óliver Torres (Banega 64'); Ocampos (Rony Lopes 54'), Dabbur y Chicharito (Munir 79').
Gol: 0-1 (16') Koundé.
Árbitro: Pablo González Fuertes (asturiano). Amonestó a Diego y Cristopher por parte del Bergantiños; a Ocampos y Chicharito por parte del Sevilla.
Incidencias: Estadio de Riazor ante unos 3.677 aficionados.