Desde que empezó a jugar al fútbol con sólo seis añitos, en su Barbate (Cádiz) natal,
Bryan Gil se ha caracterizado por ser una especie de llave maestra que ha abierto todas las puertas que el fútbol ha ido poniendo en su camino. A los 9 años entró en la
cantera del Sevilla y, a partir de ahí, siempre ha jugado una o dos categorías por encima de las que le correspondían por edad. Este talento precoz le llevó a
debutar con el primer equipo sevillista con 17 años, 10 meses y 25 días.
Poco después, con 18 años, dos meses y 13 días, sentó a toda la defensa del
Rayo Vallecano y se convirtió en tercer goleador más joven de la historia de la entidad nervionense (sólo por detrás de
José Antonio Reyes y
Manuel Sánchez) y en el primer futbolista nacido en el siglo XXI en ver puerta en un partido de Primera división. La temporada 2018/2019, la de su llegada a la elite, acabó este pasado verano con otro logro: ser uno de los referentes en la
selección española sub 19 que se ha proclamado
campeona de Europa de la categoría.
Sin embargo, ha sido justo ahí, tras debutar con
Pablo Machín; convertirse en habitual de la mano de
Caparrós y conquistar el cetro continental en Armenia con la 'Rojita' de Santi Denia, cuando
Bryan Gil se ha topado con la primera puerta que halla cerrada y que no consigue abrir: el del salto definitivo a la élite.
Julen Lopetegui apenas le está dando bola en este comienzo de temporada. En este mes y medio sólo ha disputado un partido. Viajó a
Cornellà y a
Granada, pero se quedó en el banquillo. Luego jugó los últimos
36 minutos en el empate en casa ante el
Celta, en la tercera jornada, cuando el calendario aún estaba con la página de agosto. Y hasta ahí su participación. No ha vuelto a ser convocado en ninguno de los cinco encuentros siguientes, cuatro de LaLiga y el estreno europeo ante el
Qarabag.
Además, la situación no tiene mucha pinta de poder mejorar, por mucho que el talento del canterano sea muy valorado por el cuerpo técnico, tal y como ha expresado públicamente
Julen Lopetegui.
Lucas Ocampos -que es fijo-
Nolito,
Óliver Torres y el
'Mudo' son los más usados por el vasco en las bandas. Además, por delante del barbateño están también, en teoría, otros muy poco utilizados como son
Pozo,
Munir y
Rony Lopes, que es el fichaje más caro de la historia de la entidad y al que también le está costando un mundo entrar en las convocatorias.
Este ostracismo de
Bryan Gil en Nervión contrasta con el alto protagonismo de su amigo
Ferrán Torres en el Valencia. El extremo es el espejo en el que se miran la grandísima mayoría de los integrantes de la selección española sub 19 que tocó plata en Armenia. Hasta ahora,
Celades ha respetado el importante rol que
Marcelino García Toral le dio en el conjunto che. Suma seis partido de
Liga (256 minutos), tres de ellos como titular, y ha dado una asistencia. Sin embargo,
Ferrán Torres es la excepción. El resto de los sub 19, más o menos, pasa por la misma situación que
Bryan Gil.
De los
20 convocados para jugar el
Europeo este verano, sólo hay tres jugadores en Primera. Uno es el propio
Ferrán Torres y los otros dos tienen un mero papel testimonial: el sevillista
Bryan Gil, con 36', y el jugador de la Real Sociedad
Ander Barrenetxea, que sólo suma ocho minutos en lo que va de temporada. A ellos se unen, entre los más afortunados,
Víctor Mollejo y
Sergio Gómez, que juegan en Segunda división en las filas del Deportivo y del Huesca, cedidos por el Atlético de Madrid y por el Borussia de Dortmund, respectivamente.
Los 15 restantes, no han podido pasar aún de
Segunda B. Sólo un poco lo ha logrado
Eric García, que ha alternado dos encuentros de la
Premier League con el City de
Pep Guardiola y otros dos con el filial del equipo de Mánchester. Otro a destacar es
Juan Miranda, que este año pertenece al
Schalke 04 alemán, donde llegó prestado por el Barcelona, pero no ha jugado aún con el primer ni el segundo equipo de Gelsenkirchen.
Abel Ruiz entrena con el Barça de Valverde, que no ha contado con él a pesar de las bajas de
Messi,
Dembélé y
Suárez y ha preferido a
Carles Pérez y a
Ansu Fati antes que a él. Así, juega con el filial culé, en Segunda B, junto a los también internacionales sub 19
Arnau Torres,
Jandro Orellana y
Alejandro Marqués. En el Real Madrid Castilla están
Víctor Chust y
Alejandro Blanco; en el Atleti B, Ricard Sánchez; en el Celta B están Moha (cedido por el Madrid) y
Álvaro Fernández; en el Valencia Mestalla,
Hugo Guillamón y en el Espanyol B,
Víctor Gómez.
Aún más abajo están dos de los más jóvenes de los héroes sub 19,
Miguel Gutiérrez y
Álvaro Sanz, que juegan la 'Youth League' y la División de Honor Juvenil en el Real Madrid y el Barcelona. Es decir, aunque haya quien se tire de los pelos al ver a
Bryan Gil tan desaprovechado, en realidad es un privilegiado. Aunque, eso sí, encuentre cerrada la puerta.