Ha sido uno de los temas del verano. Y sigue siéndolo, porque la amplia mayoría no alcanza a entender por qué Julen Lopetegui no ha dado ni una sola oportunidad a
Munas Dabbur (27), a quien ni siquiera ha metido
en sus listas previas de 21 jugadores, por el que el Sevilla pagó alrededor de
15 millones de euros y que firmó
37 goles y 16 asistencias durante la 18/19.
Huelga decir que
no tiene que ver su ostracismo con que se trate de
un fichaje de Joaquín Caparrós y que Monchi, como defienden algunos, quiera arrasar con todo lo hecho por el utrerano, pero sólo se ofrece una explicación desde Nervión:
"El entrenador entiende que hay otros jugadores por delante ahora mismo". Y lo entendía el técnico nervionense, incluso, cuando no tenía más competencia que la de un
De Jong que todavía no ha visto portería.
Con sus primeras ausencias en las convocatorias y el runrún en la prensa, comenzaron a producirse llamadas de diferentes intermediarios y clubes, por lo que
el agente del israelí viajó hasta la capital hispalense para conocer qué ocurría con su situación, así como para transmitir que
contaba con algunos sondeos y ofertas. En el Sevilla no le dijeron en ningún momento que no contaba, por lo que Dabbur, estrella en la liga austríaca y su país,
se negó a marcharse. Confía en sus cualidades y trabaja para tener su oportunidad.
Lo va a tener complicado en LaLiga, eso sí. Y es que Lopetegui, pese a intentar restarle importancia al dibujo, se muestra reticente a cambiar un
4-3-3 en el que
el punta se le exige mucho sacrificio. El israelí está
lejos de De Jong e incluso Chicharito en ese sentido y, pese a que puede generarse una ocasión por sí mismo, es más de aprovecharse del trabajo de otro delantero para ponerse de gol.
El Dinamo de Moscú ofertóDe haber querido Dabbur, en el Sevilla no se cerraba a la opción de que saliese y llegaron ofertas, como la que desvelan en Rusia del Dinamo de Moscú, que ofreció
cuatro millones por su cesión hasta final de temporada. El club rechazó la propuesta.