El
Sevilla ha puesto sus ojos en la figura de
Steven Bergwijn para reforzar su banda derecha; una guinda al pastel que se antoja complicada, teniendo en cuenta que el
PSV, club al que pertenece, ha rechazado los
25 millones de euros de la primera propuesta sevillista y que solicita
40 kilos; una cantidad que se antoja prohibitiva para los de
Nervión, que ya han comenzado a trabajar en alternativas como
Raphinha (Sporting de Portugal) por si se acaba torciendo del todo el asunto en este mes de agosto.
De hecho,
Van Bommel, técnico del
PSV Eindhoven, le dio el pasado sábado los 90 minutos en el empate a uno ante el
Twente en la primera jornada de la
Eredivisie, todo lo contrario que a la otra estrella del equipo,
Hirving Lozano, quien se encuentra también en la puerta de salida y no gozó de oportunidades, lo que ha aumentado las especulaciones sobre la proximidad de su marcha al
Nápoles.
Y es que
Bergwijn, a quien
Van Bommel utiliza ahora por el centro, como 'playmaker', es ejemplo claro de la polivalencia en su máxima potencia. De hecho, puede hacerlo en banda, por ambos lados, así como de referencia arriba.
El curso pasado, sin ir más lejos, disputó 41 encuentros defendiendo la elástica del
PSV entre todas las competiciones (este curso no tendrá opción de hacerlo en
Champions, tras caer en la ronda previa), firmando
15 goles y 13 asistencias.Como extremo izquierdo, disputó 23 de ellos, consiguiendo siete goles y siete pases de gol. Los 18 restantes, por su parte, los disputó desde el costado diestro, acumulando ocho dianas y seis asistencias.
Esta temporada ya ha disputado cuatro encuentros oficiales con el PSV, todos ellos como mediocentro ofensivo. Hasta la fecha, suma una asistencia. El PSV sabe de su valor, y por eso se enroca en los 40 kilos.