Ni se duda con
Nolito, que está a un gran nivel durante la pretemporada, según se desprende d
e las palabras de Monchi sobre las salidas, durante la presentación de Nemanja Gudelj.
"La situación de todos ellos está muy clara. De
los que creemos que tienen que buscar un camino distinto, desde hace 45 días está comunicado. No vamos a infravalorar nuestro patrimonio ni vamos a hacer ninguna operación que no estemos satisfecho con ella. Mientras que no llegue algo que consideremos oportuno, serán jugadores del Sevilla", ha dicho el de San Fernando, sin dar nombres.
En la pregunta, no obstante, se citaba en particular al sanluqueño, pero parece claro que su situación no ha cambiado ni es diferente a las de
Aleix Vidal, Sébastien Corchia, Guilherme Arana, Joris Gnagnon, Simon Kjaer, Sergi Gómez, Ibrahim Amadou o Roque Mesa.
En Nervión saben que
queda mucho verano y que se trata de jugadores interesantes, que acabarán saliendo cuando el inicio de la tempora se aproxime y los clubes se agobien por sus necesidades.
El asunto ocupa y preocupa, claro, pero
dar salidas no ha sido una prioridad hasta ahora,
por un motivo fundamental: Monchi está llevando a cabo una revolución en la plantilla y el técnico, nuevo, necesita tener cuanto antes el mayor número de pizas posibles para armar pronto un equipo fiable. Por eso,
el isleño se ha centrado sobre todo en fichar. Y lo de las salidas también está
en manos de los respectivos agentes de los descartes, e incluso de intermediarios.
Seguramente, muchos saldrán a última hora, sobre la bocina, pues suele ocurrir y este mercado, sin Eurocopa ni Mundial,
es especialmente largo (hasta el 2 de septiembre).
La decisión del Sevilla FC, por otra parte, no sólo tiene que ver con lo deportivo. El club, sin Champions, necesita
aligerar masa salarial, la cual se ha elevado en exceso durante la ausencia de Monchi, y la mayoría de lo nombrados
cuentan con unos honorarios muy elevados. Especialmente, Kjaer y Nolito. Eso dificulta, por otra parte, que aparezcan interesados que puedan pagar por ellos un traspaso, pues los jugadores no quieren bajar su caché y resulta complicado satisfacer a ambas partes.
Con todo, en Nervión por ahora mantienen una posición de fuerza. Y,
si brillan los descartes durante la pretemporada, mejor, así les saldrán más interesados.
Es cuestión de tiempo que vayan dejando libres sus taquillas.