Quincy Promes, bigoleador en la tarde de ayer en el encuentro frente al Simba en Tanzania, hacía balance de la victoria final en Dar es-Salam. “Ha sido un partido duro, especialmente en la primera parte. En la segunda mitad ha cambiado el encuentro y hemos podido acabar ganando”, destacó el internacional holandés, quien reconoció que durante los primeros 45 minutos habían jugado “muy mal”. “Pero en la segunda hemos cambiado jugadores y nos hemos acostumbrado al calor. Queríamos ganar. Ha sido una experiencia muy buena”, apostillaba el polivalente extremo sevillista.
Por último, el holandés valoraba la que ha sido su primera temporada en LaLiga y en el Sevilla FC, en la que ha brillado por su adaptabilidad a las situaciones. “Tenía expectativas más altas en mi primer año, no me voy bien pero tampoco mal.
He jugado mucho fuera de mi lugar pero seguro que el segundo año va a ser mucho mejor”, resaltó un exigente Quincy Promes que espera más de sí en España.