Desde la marcha de Machín, Kjaer ha quedado en un segundísimo plano. - A. S.Alejandro Sáez1 min lectura
La llegada de Joaquín Caparrós al banquillo sevillista también ha afectado al danés Simon Kjaer, quien ha pasado de ser el eje de la zaga de Pablo Machín a haberse caído de las dos primeras convocatorias del utrerano. Una decisión que, como ha podido conocer ED, ha cogido por sorpresa al central, capitán y referente en la selección de su país.
Arribó a Nervión de la mano de Óscar Arias a cambio de algo más de 13 millones de euros, siendo el mejor pagado de la plantilla, junto a Banega. Hoy por hoy, no entra en los planes de Caparrós y en Italia ya hablan de un interés del Milan, que desea reconstruir su defensa.
Según Calciomercato, lo tasan en diez millones de euros y gustarían meterlo en la operación por André Silva, sobre el que el Sevilla FC tiene una opción de compra de 39 millones de euros. Pese a ello, la bajada de rendimiento del delantero luso ha cambiado los planes de la entidad nervionense, que de lanzarse a por el ariete, lo hará por mucho menos de lo pactado el pasado verano.