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Me queda mejor el chándal, pero hay que adaptarse. Imagino que a ti te sienta también mejor el micrófono, pero a veces hay que ponerse la corbata... En su momento hubo un compromiso y vuelvo al chándal, a la ciudad deportiva y metido de lleno en los diez partidos que quedan por delante, que son complicados", ha comenzado diciendo Joaquín Caparrós en los micrófonos de
Radio Marca.
Y es que el utrerano no estaba cómodo en los despachos: "El entrenador, día a día, con tus futbolistas, preparar, convivir, motivar al equipo en situaciones si vienen resultados buenos, malos, regulares...
Es lo que nos gusta, es vocacional y los que tenemos esa vocación nunca dejamos de serlo. Igual que vosotros -los periodistas- o los médicos".
Entonces, ¿por qué aceptó el cargo de director de fútbol? "En ese momento
era lo mejor para el club. Decisiones que toman para ayudar lo mejor posible a tu equipo.
Eso ya es historia, porque desconecto. Ya de eso no quiero hablar porque solo hay que hablar del Valencia; si no lo hacemos, nos cogen ventaja", ha advertido un Caparrós que mantiene el objetivo de meter al equipo entre los cuatro primeros de LaLiga.
Ser director deportivo, otro mundo"No es fácil. Cesar a un entrenador, llevar una negociación... todo eso. Es una experiencia que lo pongo en mi carrera profesional de haber ocupado un puesto importante pero eso ya es historia. Cuando me preguntan, aunque hace quince días, parece que han pasado muchos años".
Otra vez en el césped"No creía que iba a volver a entrenar al Sevilla, pero la vida da muchas vueltas. Tampoco lo pensaba la temporada pasada o la vuelta de Monchi que iba a ser tan rápida. Hay que disfrutar cada momento y vamos a ver dónde podemos llegar".
El plantel"Hemos confeccionado una muy buena plantilla, con futbolistas con mucha proyección, internacionales y ahora toca pelear cada jornada al máximo para tener un fin de temporada bueno".
¿Hay cansancio?"Los jugadores no tienen fatiga. Hay algunos que están saliendo de una lesión, como puede ser Pablo (Sarabia), Nolito o Sergio (Escudero). Son futbolistas que tienen una cultura de jugar miércoles y domingo por ser muy buenos, internacionales o por estar en el Sevilla".
Recta final"Va quedando cada vez menos, estamos en la cuenta atrás y es un partido difícil para los dos. Está todo muy igualado, hay enfrentamientos de todos contra todos en estos diez partidos y ahora más que el aspecto físico tiene que ver el aspecto mental".