Pablo Machín defendió mientras estaba en el banquillo del
Sevilla que el problema de su equipo no era físico e incluso defendió que los datos del plantel en los últimos minutos de los partidos eran buenos. Sin embargo, ahora que no está en Nervión sí que ha apuntado al cansancio físico y mental como una de las causas del bajón que finalmente le acabó costando el cargo. "
Jugamos 50 partidos. Estábamos agotados física y mentalmente. Jugamos tres previas para clasificarnos a
Europa League y estuvimos en la parte de arriba de
LaLiga durante varios días. Sufrimos muchas lesiones y pudimos superar los obstáculos, fue un buen trabajo para los jugadores.
Luego tuvimos muy mala suerte en los partidos que perdimos en los minutos finales. Fallamos muchas ocasiones claras", ha comentado en Kooora el técnico soriano.
Como dijo el día de su despedida,
Machín esperaba haber dirigido al
Sevilla en Cornellà. "Me sorprendió mi salida del
Sevilla. Cuando se tomó tal decisión, el entrenador tiene que cumplir con ello y aceptarlo. Todo fue muy rápido, ya que perdimos en la
Europa League a última hora contra el Slavia de Praga. Al día siguiente me despidieron. Pensé que lideraría al equipo dos días después contra el
Espanyol, pero todo fue muy rápido", explica.
En cualquier caso, el ex del
Girona cree que en estas diez jornadas el
Sevilla tiene argumentos suficientes para alcanzar la cuarta plaza: "
Ahora el equipo está sexto y todos los jugadores lesionados han regresado. Hemos vivido los peores momentos pero ahora pueden prepararse para los partidos durante toda la semana. Lo que da una garantía total para lograr la victoria".