Manifiestas son las dudas de la dirección deportiva sevillista a la hora de acudir al mercado el próximo mes de enero, habiéndolas hecho públicas tanto el director de fútbol
Joaquín Caparrós como
Carlos Marchena. “Estamos buscando perfiles que se adapten a lo que queremos, pero no es fácil mejorar esta plantilla. Estamos muy contentos con ella. No queremos algo que pueda afectar al grupo.
Si vemos algo que mejore la plantilla, seguro que lo vamos a traer”, resaltó el utrerano días atrás, mientras que su adjunto resalta que “hay que tener mucha prudencia” de cara a enero: “Los jugadores que tenemos, la plantilla tan competitiva que hay... El nivel es muy alto. Queremos seguir en lo más alto, pero hay que tener sangre fría y mucho trabajo”.
Una opinión que discrepa con la del entrenador sevillista
Pablo Machín, quien, siempre que tiene ocasión, no duda en
solicitar públicamente
refuerzos de cara a la próxima ventana de transferencias. Justo lo que quedó pendiente el pasado verano:
un central, donde el soriano entiende que existe un “déficit” en la plantilla, y un “un jugador polivalente de centro del campo y ataque” que Machín personificaba en la figura de
Portu y que ahora, en cambio, gustaría desdoblar en un delantero que le dé el relevo a André Silva y Wissam Ben Yedder cuando lo requieran (Muriel y Promes están demostrando que el gol se resiente cuando lo hacen ellos) y, a ser posible, en un centrocampista que refuerce la zona ancha, donde Éver Banega se ha asentado como pivote por delante de la línea de tres centrales y en la que Nolito, al igual que ocurre arriba con Promes y Muriel, no acaba de mantener el nivel cuando el ‘Mudo’ y Sarabia requieren refresco. Un perfil que, con la nueva lesión de Gonalons, cobra fuerza, aunque está más en manos de
“la oportunidad del mercado” que de otra cosa.
Donde sí se ha salido con la suya Machín es con el asunto del central, que, como ha podido conocer ED, se ha convertido en la
prioridad de la dirección deportiva sevillista, que quiere contentar al soriano en ese “déficit” defensivo, siendo hoy por hoy la prioridad a firmar de cara a enero. Jugando con una línea de tres centrales, Caparros le reconoce al técnico que lo
ideal es
contar con dos por puesto, habiendo sólo cinco: Carriço, Kjaer, Mercado, Sergi Gómez y Gnagnon, quien además, no está ofreciendo el nivel esperado. También puede participar ahí
Amadou y, en menor medida,
Escudero; así como el canterano
Berrocal (lesionado), al que también ha utilizado Machín, pero en Nervión son conscientes de que Sergi Gómez apenas ha tenido descanso por culpa de este desequilibrio.
Fernando Calero (Valladolid), cuya cláusula es de
once millones de euros y quien lo tendría más adelantado con otro de los clubes que también lo siguen (Villarreal, Real Sociedad, Valencia y Atlético); el central danés de la
Sampdoria Joachim Andersen, de 22 años, 1,90 metros y en la órbita de Arsenal, Borussia Dortmund, Valencia y Juventus; el excolchonero
Miranda, ahora en las filas del Inter de Milán, y
Juanpe, al que Machín propuso el pasado verano, cuando el Girona exigió su cláusula (12 kilos), son algunos de los nombres que se encuentran sobre la mesa de Joaquín Caparrós, junto a otros, como el del turco-alemán
Serdar Tasci, quien ha llegado a las oficinas del Sánchez-Pizjuán en forma de ofrecimiento.