Conseguir la mejor versión del prometedor Guilherme Arana es uno de los objetivos que tiene Pablo Machín y su cuerpo técnico entre manos desde que comenzó la temporada, potenciando su faceta defensiva y, una vez conseguido eso, permitiéndole lanzarse más cómodamente al juego de ataque.
El trabajo, visto lo visto en las últimas fechas, está consiguiendo sus frutos. Y, para ello, uno de los curiosos métodos de motivación utilizados por la entidad sevillista ha sido, según refleja Radio Sevilla, el visionar vídeos de sus propias actuaciones en Brasil, con la camiseta del Corinthians.
Se trata de una fórmula con la que el club le ha hecho ver lo que es capaz de hacer con el balón en los pies. Una verdadera terapia de choque en la que el joven zaguero repasó su mejor versión, ésa que aún no se ha visto en Sevilla y con la que se le hizo saber cuál es su rendimiento real, por el que le fichó en enero.