Se han puesto las pilas en Nervión, donde el presidente
José Castro, junto al consejo, ha acelerado la marcha en la búsqueda de un recambio para
Óscar Arias como director deportivo del
Sevilla Fútbol Club. Cerrada la 'vía Cordón' (tanto el club como el madrileño se han descartado mutuamente por cuestiones varias) y desechadas otras opciones por el hecho de ser extranjeras y no contar con la experiencia en
España que, entienden, es necesaria para hacerse cargo de la parcela deportiva sevillista, la entidad blanquirroja tiene ya perfilado el retrato robot del que debe ser la figura que haga olvidar a
Monchi en el Sánchez-Pizjuán.
Tras unos días de dudas en los que no se llegaba a un consenso entre los diferentes consejeros, el perfil está claro: español, experimentado y con holgada experiencia en
LaLiga. Un boceto al que las estructuras sevillistas, conocedoras del tiempo perdido, no han tardado en darle forma, habiendo negociado ya con tres profesionales en la materia:
Ramón Planes (Getafe CF),
Felipe Miñambres (Celta) y
Braulio Vázquez (CA Osasuna).
Nombres que ESTADIO Deportivo ha podido confirmar en el seno de la entidad y que, según indican a esta redacción, disponen actualmente de las mismas opciones de acabar haciéndose con los mandos de la nave sevillista. Una primera toma de contacto que ha dejado muy buen sabor de boca en la planta noble del
Sánchez-Pizjuán, donde, en su deseo de cumplir los plazos anunciados cuando se oficializó la destitución de
Arias (un mes), pretenden cerrar el asunto cuanto antes; es decir, esta misma semana. El tiempo apremia, pues tras el director deportivo tiene que llegar el entrenador y, ya con ambos en
Nervión, comenzar a planificar una temporada en la que el
Sevilla comenzará a competir antes de lo habitual, teniendo que afrontar hasta tres rondas previas de la
Europa League.
Tres currículums, un puestoQue avance más una negociación que otras, dependerá ahora de las impresiones dejadas durante los diferentes contactos llevados en las últimas horas, en los que, junto a la idea que tiene cada uno de los tres candidatos sobre el rumbo que debe tomar el equipo en lo deportivo, el
estilo de juego o el
análisis de la plantilla, entre otras cosas, se ha tratado también el asunto del futuro entrenador. Un aspecto que cobrará bastante peso en la decisión definitiva, al no contar ya el club con margen de error al respecto tras una temporada en la que se ha errado más de lo esperado.
La mayor o menor facilidad a la hora de cerrar a uno de los tres candidatos marcará, también, la decisión final.
Miñambres dispone de una cláusula de rescisión que tendría que pagar el
Sevilla en concepto de indemnización, mientras que
Braulio Vázquez goza de un año más de contrato y niega contactos.
Planes lo tendría más sencillo.