A estas alturas pierde importancia determinar si se trata del nivel real de la plantilla o de si su rendimiento se encuentra por debajo de sus posibilidades por una deficiente gestión desde el banquillo. Ahora, a un partido del ecuador de la competición y tras agudizarse la crisis con la derrota en el derbi, es el momento de que la dirección deportiva aproveche la ocasión que le ofrece el mercado de minimizar los problemas con fichajes en el mercado invernal. Supone aceptar los errores cometidos en verano pero también la oportunidad de enmendarse con refuerzos que cubran las evidentes carencias de un
Sevilla inconsistente sin el balón y blando en las dos áreas, lo que obliga a reforzar cada una de las líneas en busca de contundencia, profundidad y remate. En este sentido, al contrario que otros años, la respuesta no se halla en un retoque puntual, como el curso pasado con la llegada de
Jovetic y Lenglet, sino en intervenir la columna vertebral de un equipo que se desangra en la contención y que no cuenta con un rematador nato en un sistema pensado para explotar los carriles y los centros laterales. Una vez cerrada la llegada de
Guilherme Arana para la banda zurda, donde competirá con
Escudero y Carole por la titularidad, el
Sevilla debería potenciar hasta cuatro posiciones para atajar la hemorragia, aunque, lógicamente, sólo podría ser así si también se produjeran salidas para dejar fichas libres. Independientemente de esta circunstancia, que Arias ya habrá tenido en cuenta de cara a la planificación invernal, estos son los puestos que presentan un mayor déficit y que necesita reforzar.
Un lateral derechoLa dirección deportiva dio en verano luz verde a la salida de
Mariano, un valladar en el carril diestro sevillista por su capacidad ofensiva, y el bajón en esta demarcación ha sido evidente. Arias trajo al galo
Corchia en su lugar, pero
Berizzo prefirió contar para el carril con
Mercado, firme atrás por lo general pero muy expuesto a la hora de subir por sus limitaciones técnicas. El galo, sin continuidad hasta la llegada de
Montella, ha acusado la falta de ritmo y tampoco ha ofrecido garantías en sus apariciones, desaprovechando las dos oportunidades consecutivas que le ha ofrecido el italiano. El francés, titular con
Cádiz y Betis, no convence por sus dudas en defensa y su timidez en ataque a pesar de poseer recursos para atreverse más, quizás por la ausencia de confianza.
Navas se presenta como una alternativa en los planes del nuevo técnico, lo que no impide que el
Sevilla se haya interesado en el regreso de
Aleix Vidal.Un centralEl problema defensivo del
Sevilla va más allá de nombres propios, es de índole estructural, pero el bajo rendimiento de
Kjaer y la fragilidad física de
Pareja y Carriço, por el que
Berizzo apostó en verano, hacen necesaria la llegada de un líder atrás, contundente y con carácter. Si llega un lateral diestro, cabe la posibilidad de que el club considere resuelta esta carencia con el desplazamiento de
Mercado al eje de la zaga, donde se desempeñó con
Sampaoli.
Un mediocentroQuizás es lo más perentorio por las lagunas en el centro del campo de los nervionenses, que se rompen constantemente y echan en falta la presencia de un ‘stopper’ del corte de
Krychowiak.
Pizarro no termina de cuajar y
Nzonzi, de vuelta tras ser apartado por
Berizzo por rebeldía, dista un abismo del que fue el curso pasado y, viendo cómo ha regresado, no se espera que ponga de su parte para ejercer de solución, sin descartar su traspaso este mes. El sábado,
Banega se sacrificó y, además de su trabajo, realizó el del francés y y el del '
Mudo'. A día de hoy, el rosarino tiene que jugar más adelantado -ni
Franco Vázquez ni Ganso, con apenas oportunidades, se antojan una opción fiable- y necesita un doble respaldo por detrás.
Un rematadorAunque todo apuntaba en veramo a que se buscaba un delantero de referencia -se manejaron nombres como
Teodorczyk o De Jong-,
Óscar Arias no lo trajo finalmente y jugó sus cartas a Muriel, más explosivo que goleador. El enorme desembolso limitó su margen de acción y ahora, a pesar del acierto de
Ben Yedder, el
Sevilla echa en falta un ariete fuerte, que domine el área y remate los centros desde la banda.