Con Pizarro y Banega fijos en el centro del campo del Sevilla, queda una plaza en la que no logra consolidarse ninguno de los aspirantes, condicionando incluso el sistema del equipo nervionense.
Un dilema derivado de la decisión técnica de apartar a Nzonzi, porque, aunque tampoco ofrecía un rendimiento espectacular, el 'Toto' se había decantado ya por la medular formada por el galo y Pizarro por detrás de Banega. Sin el ex del Stoke, nadie ha convencido todavía al cuerpo técnico de Berizzo para completar el centro del campo, pues la que parecía su primera opción para el puesto no ha respondido a las expectativas en los últimos encuentros, caso de un Franco Vázquez que ha perdido el favor de Nervión -le pitaron cuando saltó al campo contra el Levante- y que ha ofrecido un bajo rendimiento en las oportunidades de las que ha disfrutado.
Tanto es así que el técnico de Cruz Alta apostó por recuperar del ostracismo liguero a Ganso, al que le otorgó 67 minutos contra el Levante y sustituyó cuando más estaba entrando en juego en favor de un 'Mudo' que no mejoró en absoluto al brasileño. Su poca confianza en Ganso y el mal momento de Vázquez, sumado a que se mide a un equipo potente arriba, propician que gane enteros la posibilidad de que prefiera un doble pivote con la presencia de Krohn-Dehli, efectivo que tampoco ha aportado soluciones en el verde pero que gusta al técnico. La cuarta opción sería que Geis acompañara a Pizarro, siempre y cuando fuera Mercado el que ejerciera de central por Lenglet.