La vida le ha cambiado mucho a
Johannes Geis en un par de semanas. Antes del parón era el jugador menos utilizado por
Berizzo de toda la plantilla y uno de los señalados para salir en enero. El germano seguía desde el banquillo el duelo contra el
Barcelona cuando
Kjaer dijo que no podía seguir. El técnico tiró de él para jugar como central, posición que había ocupado esporádicamente en el
Schalke. En el
Camp Nou cumplió. Más que aseado con la pelota, garantizó la salida desde atrás y no se amilanó ante los
Messi y Luis Suárez.
Ayer le llegó la reválida al de Schweinfurt. Con
Kjaer tocado,
Berizzo volvió a confiar en él para jugar junto a Lenglet en el eje de la defensa y
Geis ocupó el sitio con la confianza de quien lleva toda la vida. De nuevo manejó la pelota desde atrás con mucha solvencia. Fue el cuarto jugador del
Sevilla que más veces entró en contacto con la pelota, hasta en 69 ocasuiones y acabó el duelo con un 84 por ciento de efectividad en pases. El rating de la web especializada en estadísticas
WhoScored -elaborado a partir de varios parámetros tanto ofensivos como defensivos-
le dio un 7,83 sobre 10, la segunda nota más alta del
Sevilla, sólo por detrás de
Muriel (7,98).
Pesa en esta nota su capacidad para el pase, pero también la asistencia que propició el empate del colombiano. El alemán fue el elegido para botar todas las acciones de estrategia y acabó con el jugador con más centros al área, con 3. En fase defensiva, realizó 3 tackles, 5 interceptaciones y 4 robos, encabezando la tabla de las dos últimas facetas.
RitmoPese a no haber contado prácticamente nada hasta ahora,
Geis destacó por su agilidad de piernas y protagonizó varias anticipaciones de mérito ante la delantera celtiña.
El futbolista cedido por el
Schalke acabó el partido como lateral derecho por la lesión de
Corchia. Tampoco desentonó en esa posición. Con su partido reclama más protagonismo.