De todos los objetivos que el
Sevilla tiene en mente, la gran prioridad es reforzar el centro de la defensa, posición en la que el club centrará ahora sus próximos movimientos; sobre todo, tras la salida de Rami.
Esto explica por qué en los últimos días los nervionenses han sido
vinculados con todo un sinfín de
zagueros; en noticias basadas en su gran mayoría en ofrecimientos que, como poco, sirven para dibujar la idea que tiene
Berizzo: el de una torreta
musculosa que aporte carácter e intimidación.
En ese perfil encajan todos los que han sonado últimamente semanas, como
Eliaquim Mangala (City),
Martin Skrtel (Fenerbahçe),
Domagoj Vida (Dínamo Kiev),
Mamadou Sakho (Liverpool) o
Sidnei (Deportivo), todos al borde o por encima del 1,90, barrera que rondan también los dos últimos en aparecer en la escena blanquirroja:
Simon Kjaer (Fenerbahçe) y
Kara Mbodj (Anderlecht), nombre que ya sonó el pasado mes de enero y que, según
Diario de Sevilla, está entre los primeros puestos de la lista de
Arias, junto al internacional danés y al brasileño del Depor.
Los inconvenientes de
Kjaer y
Sidnei es su precio, pues a priori no salen por menos de 10 millones. El senegalés
Mbodj sería más asequible, pero en el
Sevilla ya saben cómo se las gasta el Anderlecht, del que sólo encontró trabas por Denis Praet y Lukasz Teodorczyk.