Parecía que su llegada, por quedar libre y tener deseos de volver a casa,
iba a ser la primera del Sevilla 17/18. Estaba cantado, pero pronto
el asunto comenzó a desafinar. Su agencia, Bahía Internacional, exigía una prima de fichaje, por llegar a coste cero, y
un salario alto, aun no llegando a lo que percibía en el Manchester City. En Nervión, mientras, se mostraban
inflexibles, haciéndole entender al canterano y a sus representantes que sus honorarios en Inglaterra no se ajustaban a mercado y que, a sus 31 años, iba a regresar para retirarse en su casa, rodeado de su gente. Así, le puso sobre la mesa
una cantidad más o menos similar a la que se le pagaba antes de que se marcharse.
Cuando todo estaba a punto de resolverse, en
una reunión prevista para comienzos de la pasada semana, llegó todo
el lío de Vitolo, con Bahía también por medio, y el encuentro se aplazó 'sine die', más aún
tras dimitir posteriormente Del Nido Jr., quien llevaba, como en el caso del canario, las negociaciones con la agencia de representación.
Este lunes, de manera inesperada,
Navas se ha dejado ver por el Sánchez-Pizjuán. Concretamente, por el Nervión Plaza, en una imagen con su hijo y con la lona de Preferencia, en la que aparece
una imagen suya junto a las de Kanouté o Palop, al fondo.
Las respuestas de los aficionados sevillistas no se han hecho esperar,
pidiendo al club el fichaje de un futbolista que siente en blanco y rojo y que, de momento, sigue esperando a 'su' Sevilla.