Una vez concluida la temporada y descalzadas las botas hasta que inicien las pretemporadas a comienzos del mes de julio, los integrantes de las plantillas de Betis y Sevilla disfrutan de sus respectivas vacaciones, donde la familia, el mar y la playa son la tónica habitual.
Un tiempo de relax en el que el descanso y las tardes de verano se convierten en sustituto del balón, a la vez que la inmensa mayoría se decantan por la playa. Y ahí, lógicamente, se impone un verano más la isla de Ibiza. Y por goleada.
De ahí que no sea de extrañar el ver por allí a hombres como Iborra, junto a los exbéticos Jordi Figueras o Xavi Torres, entre otros, o los verdiblancos Joaquín o Adán, quien también ha aprovechado para darse un salto a Formentera.
Más curioso es el caso de otro guardameta; un Sergio Rico que ha alternado los días en la isla con el Camino de El Rocío. Otros, en cambio, han optado por otros destinos más paradisiacos, como Nico Pareja o Petros, quien difunde su amor en su Brasil natal. Y es que volver a casa es otra de las costumbres en estas fechas. Si no, que le pregunten a Vitolo o Sanabria.