Ya fue citado ante la Real Sociedad y, quizás por las muchas bajas que tenía Jorge Sampaoli, volvió a repetir en una lista, en este caso para el Santiago Bernabéu.
Michael Krohn-Dehli (33) iba a ver, de nuevo, el partido desde el banquillo, pues
no aparecía en la alineación inicial que había elegido el técnico argentino. A poco de comenzar el encuentro, se confirmaba la sorpresa, a través de un mensaje enviado por el Sevilla a los medios: "
Juega Krohn-Dehli y no Franco Vázquez. No se considera cambio. Franco, lesionado".
Tras
más de un año de baja (se lesionó el abril),
dos operaciones y varios meses de entrenamiento en solitario,
existían muchas dudas sobre el posible rendimiento que podía ofrecer el danés,
e incluso miedo, por la exigencia del partido. Pero Krohn-Dehli no sólo jugó
casi los 90 minutos, sino que además fue
el hombre más destacado del cuadro nervionense, junto con Stevan Jovetic.
No sólo lo reflejan las sensaciones que dejó el ex del Celta sobre el verde; también,
las estadísticas. El centrocampista, que actuó unos metros por delante de N'Zonzi y Kranevitter, fue el segundo jugador del Sevilla que más tiempo tuvo el balón en los pies (
un 7%), sólo superado por el francés (
9,7%). Además, fue el tecero futbolista del partido que más pases dio (
70), entregando al compañero
62, lo que llevó a tener un
89% de acierto. Únicamente
N'Zonzi (92 de 97) y
Kroos (67 de 68) tocaron más el cuero que el internacional danés.
Krohn-Dehli se movió
de izquierda a derecha y
a distintas alturas, prestando apoyo siempre al receptor, tocando y moviéndose para volver a recibir, y apoyándose sobre todo en el del Stoke. Entre ambos,
se echaron la pelota 37 veces un dato nada baladí.
Más destacable es, no obstante, su labor en la resta, pese a que se le apreciaba en ocasiones
sin el nivel físico necesario para correr tras los rivales. No en vano, Krohn-Dehli fue, junto a
Marco Asensio, el jugador del partido que
más balones recuperó a través de entradas (9).
Y, realmente, no son datos ajenos al otrora fino extremo, pues al Sevilla llegó en la 15/16 con el cartel de haber sido
en la 14/15 el jugador de Primera que más balones había recuperado y, a su vez, el que más kilómetros había recorrido. Lo hizo, además,
con la carta de libertad bajo el brazo y con
una ficha relativamente baja (ronda el millón de euros), lo que le convirtió en una incorporación muy interesante. Lo fue, de hecho, para
Unai Emery, hasta que se lesionó, y se entendía que debía ser para
Jorge Sampaoli, con un gusto muy especial por este tipo de jugadores.
Krohn-Dehli firmó un contrato de dos años más uno opcional, por parte del club, lo que daba a enteder que el Sevilla, tras su larga inactividad,
le iba a dejar marchar este mes de junio. Es algo, sin embargo, que podría cambiar, y no sólo por su excelente actuación en el Bernabéu, sino también porque al banquillo nervionense
podría llegar un Eduardo Berizzo con el que ha ofrecido
la mejor versión de toda su carrera. Es decir, el danés podría pasar
de baja probable a posible fichaje. Además, para
varios puestos.
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