Monchi utiliza habitualmente la estrategia de guardar en su agenda objetivos que en un momento determinado resultan inalcanzables a la espera de que las circunstancias lo pongan a tiro. El isleño permanece atento a su situación (en ocasiones durante años) y en cuanto se presenta la oportunidad acude el primero a la caza, como ocurrió con Pareja, Banega, Llorente o el propio Nasri, ejemplo perfecto de una fórmula que podría utilizar de nuevo en enero para reforzar la delantera.
En este sentido,
Monchi baraja entre las opciones el nombre de
Luiz Adriano, delantero brasileño al que sigue desde hace mucho tiempo, desde cuando brillaba con luz propia en el Shakhtar ucraniano, con el que llegó a macar nueve goles en la fase de grupos de la Champions 14/15. Por entonces se trataba de un objetivo imposible, pero ahora, a sus 29 años, se encuentra al alcance de los nervionenses tanto en cuanto no dispone de protagonismo en el
Milan, a donde llegó en el verano de 2015 a cambio de ocho millones de euros y una elevada ficha.
En el cuadro 'rossonero' tiene por delante a
Carlos Bacca y a
Lapadula, que, aprovechando la tensa relación del colombiano con Montella, amenaza con arrebatarle el puesto. Así,
Luiz Adriano sólo ha jugado 84 minutos este curso y todo apunta a que saldrá en enero, no descartando su vuelta a Brasil, donde el Flamengo le pretende. También se le ha relacionado con el CSKA de Moscú. El
Milan estaría abierto a una cesión con opción a compra del punta, que acaba en 2020 y no entra en los planes de
Montella.El problema radica en que
Luiz Adriano no cuenta con pasaporte comunitario y en el
Sevilla todas las fichas de
extranjero están cubiertas
(Ganso, Mariano y Kiyotake), por lo que su llegada sólo sería posible si se produjera una salida que liberara una de ellas. Opción que sólo sería factible con el japonés, sin apenas minutos.