Un nivel óptimo alimenta la confianza y ésta, a su vez, potencia las cualidades innatas y aumenta considerablemente el atrevimiento, abriendo puertas que en circunstancias normales se golpean con timidez al no tratarse de una faceta destacada. Cuando se cree en uno mismo el rendimiento se dispara y se profundiza en habilidades poco desarrolladas merced a un proceso de mejoría integral que está experimentando en el presente curso
Steven N'Zonzi, omnipresente en el centro del campo del
Sevilla y con una contribución importante en un apartado en el que nunca ha resultado muy prolijo: el del gol.
No en vano, con el tanto anotado el pasado sábado contra el
Deportivo, el primero del
Sevilla en Riazor, el galo ya suma tres en lo que va de competición, lo que supone su mejor registro a estas alturas de competición en su trayectoria como futbolista. De hecho, está a solo dos tantos de superar su récord de cara a portería, establecido en los cuatro marcados en la 14/15, en las filas del
Stoke, y el curso pasado, ya con la camiseta del
Sevilla. Temporadas en las que no pasaba de los dos aciertos en el mes de diciembre, con uno hace dos años y un par a las órdenes de
Unai Emery, pues, pese a su discreto comienzo como nervionense, vio portería en las jornadas tres y seis, ante
Levante y
Rayo Vallecano, respectivamente.
Esta campaña se estrenó con un gol crucial contra el Atlético de Madrid y amplió su cuenta en Champions ante el
Dínamo de Zagreb, con el tercer tanto del cuadro blanquirrojo en la 'Bombonera'. Por último,
N'Zonzi mantuvo vivo al Sevilla contra el Deportivo con su diana al filo del descanso justo después de recibir el 2-0 por parte coruñesa. La llegada desde atrás y la confianza del francés en su remate se han convertido en una vía alternativa para cristalizar el control y la continua presencia cerca del área adversaria. A pesar de ejercer de pivote de contención, no duda en sumarse al ataque y rentabilizar tanto su altura como su certero disparo, armas que ayudan a compensar la ausencia de un 'killer' de área.
En la
Premier promedió dos goles por campaña, cifra que ya ha superado esta temporada en el
Sevilla, amenazando con pulverizar su mejor marca hasta el momento, reflejo de su crecimiento en
Nervión y de que le favorece el plan ambicioso de
Jorge Sampaoli.