Alberto Gálvez3 min lecturaUn día le ha durado la alegría al corredor belga Thibau Nys (LIDL-TREK), quien en la primera jornada de la Vuelta a Polonia hizo un tiempo de 3:37:07 para hacerse con la primera plaza en el primer día de la competición. Y se la ha arrebato ya el gran favorito, Jonas Vingegaard (Team Visma).
El danés ya es el nuevo líder de la general tras imponerse en la contrarreloj realizada este martes entre Myslakowice y Karpacz (15,4 kilómetros). El ciclista nórdico marcó el segundo mejor tiempo (24:08) tras su paso por meta, quedándose a nueve segundos del campeón de la contrarreloj, el ciclista belga Tim Wellens (UAE), con un tiempo de 23:59. En tercer y cuarto puesto, a 15 segundos de Wellens, llegaron el austriaco Felix Grobschartner (UAE) y el escoces Oscar Onley (DSM).
Raúl García Pierna (Arkéa) fue el mejor de los españoles a 40 segundos, mientras que Xavier Azparren (Pro Cycling Team) cedió un minuto y 49 segundos con el belga.
De esta manera, el ciclista danés se sitúa primero de la general con un tiempo, tras bonificación, de 4:01:27, seguido del neerlandés Wilco Kerderman (TVL), a 24 segundos, mientras que el italiano Diego Ulissi (UAE) es tercero a 25 segundos.
La tercera etapa se disputará mañana miércoles entre las provincias de Wałbrzych y Duszniki-Zdrój, en un trayecto de montaña de 156.5 kilómetros.
Desde que se cayera en el País Vasco y se recuperara de forma casi milagrosa para disputar el Tour de Francia, a Jonas Vingegaard le está costando volver a ser el que era. La confianza en sí mismo y el miedo a tocar el asfalto le están impidiendo reinar como estaba acostumbrado.
Sin ir más lejos, la semana pasada volvió a la competición en la Clásica de San Sebastián tras su segundo puesto en la clasificación general final del Tour de Francia y el danés, que aspiraba a su primera victoria en una carrera de un día importante, se quedó en la penúltima subida.
El ciclista de 27 años evidenció una vez más que sigue sin estar en su mejor forma en estos momentos, descolgándose a falta de 41 kilómetros en la penúltima subida del día a Erlaitz.
Finalmente, la gloria en tierras donostiarras se la llevó el corredor suizo del UAE Marc Hirschi, quien se impuso en un apretado esprint final sobre el gran animador de la carrera, el francés Julian Alaphilippe, que fue quien rompió la carrera en el último puerto de la jornada.