CICLISMO

Van der Poel deja sin respuesta al equipo Movistar

El neerlandés de Alpecin hace historia al sumar su tercer Tour de Flandes consecutivo

Van der Poel deja sin respuesta al equipo Movistar
Van der Poel, celebrando su victoria en el Tour de Flandes - CORDON PRESS
Alvaro ArenillasAlvaro Arenillas 4 min lectura

El neerlandés Mathieu Van der Poel (Alpecin Deceuninck) hizo los honores a su condición de favorito y al maillot arcoíris de campeón mundial con una portentosa exhibición en la 108 edición del Tour de Flandes disputado entre Amberes y Oudenaarde, con un recorrido de 270.8 kilómetros, un triplete para su quinto monumento.

Van der Poel (Kepellen, 29 años), fiel a su estilo, y tirando de un poderío al alcance de muy pocos, levantó los brazos por tercera vez como un autentico "León de Flandes". Exhibición en solitario en los últimos 40 km, intratable y genial, reduciendo a sus rivales a la lucha por la segunda plaza.

La cabalgada le permitió al rey del ciclocrós lograr su quinto monumento, ya que además tiene en su vitrina los trofeos de la Milán San Remo y París Roubaix. Se presentó en meta con tiempo para el deleite personal, con un tiempo de 6h.05.23, a una media de 44,5 km/hora.

Los perseguidores llegaron finalmente en un nutrido grupo de 9 hombres, cediendo Alberto Bettiol y Dylan Teuns en los últimos metros. Entró segundo el italiano Luca Mozzato (Arkéa - B&B Hotels) y tercero el australiano Michael Matthews (Jayco AlUla), a 1.07 minutos del ganador.

Entre los que más intentaron batir a la bestia de Alpecin estuvieron los corredores del equipo Movistar Iván García Cortina y Oier Lazkano. Conforme se acercaba el Viejo Kwaremont empezaron las verdaderas hostilidades. Movistar movió ficha a 56 kilñometros de meta con Oier Lazkano, lo que despertó el ímpetu voraz de Van der Poel, quien puso una marcha que anuló la fuga y abrió la fase clave de la carrera.

El neerlandés hizo las primeras pruebas saliendo del Kwaremont y luego en el Paterberg, seleccionò un grupo de 9, con Lazkano y Cortina entre ellos, y con otros nombres destacados como Wellens, Politt y Mohoric entre otros. Fue Cortina quien atacó hasta abrir hueco, pero una caída en el adoquinado mojado del Peterberg le obligó a poner pie a tierra, como la mayoría de los corredores, circunstancia que salvó Van der Poel por la pericia de un séxtuple campeón mundial de ciclocrós.

El recital de Van der Poel

Con 40 kilómetros por delante y lluvia abundante, Van der Poel se lanzó en una particular contrarreloj hacia la gloria, directo a su tercer Tour de Flandes consecutivo y quinto podio, cifra por nadie igualada. A base de tremendas pedaladas la escabechina fue en aumentó. Un fuera de serie contra 7 perseguidores, y todos ellos de alto nivel, con Cortina, Wellens, Teuns, Bettiol, Jorgenson... Nadie impidió que a 33 de meta el neerlandés tuviese minuto y medio de renta.

De ahí al final Van der Poel no dio opción a nadie. Cruzó la meta, se bajó de la bicicleta, la levantó y la mostró al cielo, como un trofeo especial. No en vano era su quinto monumento y el quinto podio consecutivo en Flandes, un récord histórico. Sí, esta bestia corre para hacer historia.