Pese a los impagos y a la más que convulsa situación política que casi deja al Real Ciencias sin participar en los cuartos de final de la División de Honor del rugby español, tras lograr un gran triunfo haciéndose fuertes en La Cartuja y ganándose la presencia en las semifinales, demostrando que pese a que todo a su alrededor se desmorone, el rugby sigue en lo más alto en la capital hispalense. Tras el resto de duelos de cuartos de final, el Recoletas Burgos Caja Rural se enfrentará contra el Club de Rugby El Salvador y el VRAC Quesos Entrepinares será el rival del Ciencias en estas semifinales de la competición que se jugarán el fin de semana del 24 y 25 de mayo.
En una gran mañana sevillana, el Real Ciencias venció este domingo a la Unió Esportiva Santboiana por 37-15 en un partido en el que los locales dominaron de principio a fin, arropados por su afición, que les llevó en volandas al triunfo, para sellar el billete a las semifinales, en las que se cruzarán con el VRAC Quesos Entrepinares; después de que en el último encuentro de cuartos, el cuadro vallisoletano se hiciera fuerte en el Pepe Rojo para doblegar al Complutense Cisneros en un emocionante partido por 30-21. El VRAC recurrió a la experiencia para ponerse a dos partidos del campeonato, pero no lo tendrán nada fácil ante los andaluces.
El gran favorito, el Recoletas Burgos, logró el pase en el Bienvenido Nieto al vencer al CP Les Abelles valenciano en un duelo entre el primero y el octavo de la fase regular por una claro 53-7, en el que fue el más desigualado de los cuatro duelos de esta antepenúltima ronda. El equipo de José García impuso su ritmo y desplegó su mejor rugby para conseguir su billete, fase en la que se cruzará en Burgos con el CR El Salvador; los de Valladolid se deshicieron ayer sábado por 36-17 del Silicius Alcobendas Rugby, que al final del primer tiempo dominaba por 11-17, pero que en el segundo no pudo anotar más ni frenar al cuadro vallisoletano dirigido por Álvaro Gorostiza.
Tras estos partidos, todo muy decantados salvo el VRAC-Cisneros, la División de Honor vivirá unas semanas de parón, donde uno de los focos de atención estará en el Real Ciencias, y en ver si es capaz de solucionar sus problemas económicos e institucionales, o si por el contrario sus hombres terminan por plantarse y no juegan hasta que reciban lo que se les debe.