El Mundial de Marcha de Budapest está siendo grandioso. Tras la gran victoria vivida durante el día de ayer a manos de Álvaro Martín, España vuelve a celebrar la llegada de un nuevo título gracias a María Perez.
La atleta ha destacado tras realizar una carrera sensacional en la prueba de los 20 kilómetros de marcha celebrada durante esta mañana, donde la paciencia y disciplina eran fundamentales para poder ganar.
María Pérez era una de las favoritas para lograr el título, ya que no solo logró el oro en los Europeos de 2018, sino que también es la gran protagonista de la mejor marca mundial de la temporada: 1h:25.30.
La carrera no fue nada fácil, pues la gran lista de rivales parecía interminable. Entre ellas se encontraban la peruana Kimberly García León (oro en 20 y en 35 km en el pasado Mundial), la italiana Antonella Palmisano (oro en 20 km en los Juegos de Tokio), la griega Antogoni Ntrimpspioti (oro en 20 y en 35 en el pasado Europeo).
Sin embargo, pese a todos ‘los obstáculos’ que tenía que superar, la clave de su éxito fue sin duda la paciencia. Pérez guardó todo lo posible su energía para poder ‘apretar’ en el momento en el que lo viera oportuno, concretamente a falta de tan solo 5 kilómetros. Llegados a ese punto, la atleta comenzó a acelerar tras acordarlo con su entrenador Jacinto Garzón, sorprendiendo al resto de corredoras, muchas de ellas con un nivel de energía bastante menor.
Tras este suceso, consiguió superar a las siete atletas que tenía por delante, creando una fila que poco a poco se fue separando. La única atleta que logró alcanzarle fue Montag, terminando la carrera con la plata.
El oro con el que María Pérez se ha coronado no solo ha sido una enorme alegría para España, sino sobre todo para ella misma. La atleta pudo celebrar a lo grande la victoria, sobre todo al tratarse de su regreso después de permanecer alejada de la marcha durante un largo periodo de tiempo tras vivir un curso pasado bastante duro lleno de descalificaciones consecutivas.
A su vuelta, decidió cambiar completamente su táctica, por lo que desde enero ha trabajado muy duro para ser mejor vista bajo la mirada de los jueces, mejorando su centro de gravedad y prolongando su zancada entre muchas otras cosas, algo que poco a poco ha ido dando sus frutos, como por ejemplo mejorando su récord del mundo de 35 kilómetros.
Tras este día, María Pérez pasa a la historia consiguiendo el segundo oro femenino de la historia de los Mundiales para España. El primero fue logrado por Niurka Montalvo en la prueba de longitud en Sevilla en el año 1999.