Alvaro Arenillas3 min lecturaSi el parte de lesiones de Jonas Vingegaard ya sonada duro per se, ahora sabemos que la recuperación será más complicada de lo esperado, ya que a la fractura de clavícula y costillas que se detectó en un primer momento, ahora hay que sumar una contusión pulmonar y neumotórax tras su caída en la cuarta etapa de la Itzulia 2024.
Tal cual lo ha explicado el equipo Visma-Lease a Bike, que en un comunicado posterior al parte inicial ha señalado que "un examen más detallado en el hospital reveló que también sufrió una contusión pulmonar y un neumotórax"; eso sí, señalan que en cualquier caso el danés ha pasado buena noche.
Con este nuevo escenario las dudas sobre su participación en el Tour de Francia se disparan. Aunque quedan 84 días y se da por hecho que podría estar recuperado para entonces, las dudas aparecen al entender igualmente que es muy probable que no se encuentre al cien por cien. ¿Por qué? Pues porque lo que se estimaba una espera de pocas semanas para empezar a verle entrenando ha pasado a ser un periodo que puede alcanzar hasta el mes y medio.
Cuestionado por el futuro de sus discípulo, y más en concreto por qué ocurrirá con la ronda francesa, el director del equipo, Frans Maassens, asegura que es pronto para saber qué harán, ya que hay que esperar antes a ver la evolución que tiene Vingegaard.
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"La decisión se tomará en días o semanas. Podemos mirar un poco hacia delante otra vez. Su cabeza y sus piernas están bien. Pero, por supuesto, todavía tiene dolor y la recuperación llevará un tiempo. Tendremos que esperar días y quizás semanas antes de poder decir algo sobre el Tour", comenta a Sporza.
En cuanto a la caída sufrida por la estrella de su equipo y las circunstancias en las que se dio en la Vuelta al País Vasco, entiende que es un riesgo que ya conocían y que la solución no está en reducir la velocidad de las bicicletas.
"La Vuelta al País Vasco es siempre una carrera peligrosa y cada descenso es peligroso. Llegas con un pelotón compacto y todos quieren estar delante. Entonces la presión es tan grande que rápidamente se producen caídas. No es una opción hacer un cambio drástico. El ciclismo es un deporte de velocidad y siempre hay curvas. Siempre ha sido así. Desafortunadamente esta temporada ha habido muchas caídas, pero ya digo, siempre será así", finaliza.