Jon Rahm y el problema de las apuestas en el golf

El golfista español alertó al PGA Tour sobre el tema, invitando a la organización a "estudiar" una solución

Jon Rahm y el problema de las apuestas en el golf
Jon Rahm - Twitter / @JonRahmpga
José Antonio RiveroJosé Antonio Rivero 4 min lectura

El destacado golfista español Jon Rahm compartió sus reflexiones sobre la creciente presencia de apuestas deportivas y su impacto en los torneos de golf durante una rueda de prensa previa al Tour Championship en Atlanta. Rahm señaló que es común para los golfistas escuchar a los espectadores hablar sobre apuestas relacionadas con los torneos y consideró que esta situación es algo que el PGA Tour debería abordar y estudiar para evitar que la influencia de las apuestas "se vaya de las manos".

Rahm subrayó que los golfistas suelen notar a los aficionados conversando sobre sus apuestas durante las rondas de juego, ya que en el golf los espectadores están cerca del campo y cualquier comentario puede ser audible para los jugadores. Incluso cuando los comentarios no se dirigen directamente a los golfistas, la cercanía de los espectadores permite que estos escuchen conversaciones relacionadas con apuestas entre los aficionados. "Los notamos en cada ronda (aficionados que hablan de sus apuestas), pasa mucho más de lo que creéis, es muy, muy presente. En el golf los espectadores están muy cerca e incluso si no hablan directamente a ti, estás lo suficientemente cerca que si uno dice a su amigo, 'te apuesto diez dólares que va a fallar', lo escuchas", dijo el golfista vasco.

"Pasa más a menudo de lo que piensas. Afortunadamente, los aficionados son buenos en la mayoría de los casos, y dicen 'tengo veinte dólares en tu birdie'. Es algo que no se nota por televisión quizás, pero es algo que pasa", siguió diciendo Rahm.

El tema cobró relevancia cuando se informó que un aficionado en el BMW Championship de Chicago intentó distraer al golfista Max Homa durante un putt debido a que había apostado en su contra.

El golfista español reflexionó sobre la complejidad de la situación, considerando que en un deporte individual como el golf, donde no hay equipos sino jugadores individuales, las apuestas podrían influir en el rendimiento y la concentración de los golfistas. Rahm opinó que el PGA Tour debería examinar cuidadosamente este asunto, ya que el golf ofrece una oportunidad relativamente sencilla de condicionar a los jugadores debido a la naturaleza solitaria del deporte. Sin embargo, también reconoció la dificultad de controlar a una gran cantidad de espectadores en un campo de golf, lo que complica la tarea de regular la influencia de las apuestas.

En última instancia, Rahm planteó la necesidad de encontrar un equilibrio entre el disfrute y la participación de los aficionados en el golf y la necesidad de mantener la integridad y la justicia en el juego. La relación entre el deporte y las apuestas es un tema complejo que requiere una cuidadosa consideración y medidas adecuadas para garantizar que el juego siga siendo una competición justa y emocionante para todos los involucrados.

"En un deporte como este, en el que puedes tener a tus favoritos, pero no hay equipos, creo que el Tour debería estudiarlo, porque no quieres que se te vaya de las manos. En el golf es muy simple si quieres condicionar a algo. Pero al mismo tiempo sería muy difícil controlar a las 50.000 personas que están en un campo", concluyó Rahm.