Antonio José Medina3 min lecturaEl Trump National Doral, uno de los campos propiedad de Donald Trump, acoge por cuarto año en Florida uno de los torneos del LIV Golf, un evento que apoya el presidente estadounidense y que servirá de preludio del Masters de Augusta que se celebra la semana próxima.
A él llega Jon Rahm como segundo del ránking tras el chileno Joaquín Niemann y Sergio García, que tras gana en Hong Kong, marcha tercero individual y como líder destacado por equipos con sus Fireballs GC, campeones de los cuatro últimos eventos celebrados.
El golfista vasco está viviendo un inicio de temporada similar a la del pasado año, cuando no rindió hasta que llegó el mes de julio. Eso no impidió que siempre acabara entre los diez primeros de cada torneo -como ahora- o que ganara la Orden de Mérito del LIV Golf con su remontada a final de temporada. Sin embargo, no llegó bien a ninguno de los tres Majors que se celebran en primavera, empezando por un Masters de Augusta en el que defendía la corona ganada el año anterior.
Sin embargo, Jon Rahm se muestra optimista, rehúye de que esté jugando mal y avisa de lo que puede ofrecer en estos torneos que ahora le llegan en Estados Unidos. “Creo que, especialmente estas últimas semanas, he estado jugando muy bien al golf y me siento muy cómodo. Obviamente, Augusta es un nivel completamente diferente, al igual que el Blue Monster, pero por eso me gusta esta semana. Es una excelente preparación para un ‘Major’ que está a la vuelta de la esquina. Espero que esta semana vea algunas de esas mejoras y llegue a la próxima con la mente clara de lo que hacer”, indicaba antes que nada el León de Barrika.
Pese a todo, Rahm tiene claro que debe elevar el nivel en este LIV Golf de Miami para aspirar al título y mucho más en el Masters de la próxima semana, donde volverá a coincidir con los mejores jugadores del PGA Tour y del DP World Tour. “Me siento bien, he logrado muchos buenos resultados este año, pero diría que no he jugado a mi mejor nivel, necesito algo más", admite Rahm.
Eso contrasta con la confianza que muestra y que le hace ser optimista para estos dos torneos venideros. "Cada vez que jugamos, todos pensamos que vamos a ganar. Yo siempre tengo una confianza ciega en mis posibilidades”, añadía el golfista español, que tiene claro cuál es su verdadero objetivo. “Es difícil que los ‘Majors’ tengan aún más importancia. Son la cumbre de nuestro deporte y, como dijo Phil -Mickelson, con quien compartía mesa-, definen una carrera", confirmó.