Cada vez se antoja más complicado ver a Conor McGregor enfrentarse a Ilia Topuria, pese al deseo de ambos. Cada vez existe más ruido alrededor que lo impiden y, sin ir más lejos, la última sentencia que ha recaído sobre el luchador irlandés ha podido ser la gota que colma el vaso para que dicho combate no se lleve a cabo.
Y fruto de ello y viendo que el hispano-georgiano vive el momento más dulce de su carrera y que le ha quitado todo el protagonismo en la UFC, McGregor no ha podido hacer oídos sordos al deseo de Ilia de pasar de peso pluma a peso ligero. Y esta reacción se está convirtiendo ya en todo un clásico cuando Topuria es actualidad por cualquier motivo.
El excampeón del peso pluma y del peso ligero de UFC ya dijo que le partiría la cara en cuanto lo viera, pero viendo que dicho enfrentamiento puede que nunca llegue a producirse, al menos a corto plazo, ha decidido mofarse un poco más de su trayectoria, haciendo gala de suya. Y lo ha hecho a través de las redes sociales, donde el irlandés ha escrito lo siguiente: "Aquí está la verdad que lastimará a todos los pequeños aspirantes a don nadie. Pelear era demasiado fácil para mí, lo hice todo cuando tenía 27 años".
Sin duda unas palabras que ha usado para menospreciar todo lo que de aquí en adelante Topuria, que ahora mismo tiene esa misma edad. Otros también ven en dicho mensaje que Conor no volverá a pelear más porque parece que ya lo consiguió todo., si bien esta misma semana, el luchador británico se acordó de Michael Chandler y le retó una vez más.
Y mientras tanto, en torno a su figura todavía retumba la condena que ha recibido de 250.000 euros por un acto de violación a una mujer en el año 2018. Un veredicto con el que McGregor no está de acuerdo pero que ya le ha costado la ruptura con varios de sus patrocinadores.
Cabe recordar que fue un jurado compuesto por ocho mujeres y cuatro hombres en el Tribunal Superior de Dublín el que ratificó la versión de Nikita Hands, de 35 años, en la demanda civil presentada contra McGregor y James Lawrence, amigo de la estrella de las artes marciales mixtas, si bien este último fue exculpado del incidente ocurrido en un hotel de Dublín en diciembre de dicho año.
Los representantes legales de la demandante habían pedido como indemnización 750.000 euros para realojar a su clienta, quien dejó la casa que había comprado con su entonces pareja tras la agresión, así como un millón de euros por la pérdida de ingresos tras abandonar su trabajo en el salón de belleza por motivos de salud mental.
Finalmente, el juez Alexander Owens explicó que la indemnización aborda los "daños generales y especiales", que incluyen gastos médicos, que ha sufrido Hands por la agresión sexual, si bien no contempla "daños ejemplarizantes ni agravados", lo que hubiese elevado la cuantía.