El danés Jonas Vingegaard permanece ingresado en el Hospital de Txagorritxu de Vitoria después de su gravísima caída durante la Vuelta al País Vasco. Se espera que abandone el centro hospitalario vasco en el día de hoy junto a su familia para regresar en avión a su país, un traslado que se antoja complicado debido a las lesiones sufridas por la caída. El riesgo está ahí, por eso son horas clave para determinar si es posible aguardar unos días más.
Clavícula fracturada, dos costillas rotas y un neumotórax acompañan el parte médico del actual campeón del Tour de Francia. El danés lleva ya una semana y media ingresado en Vitoria. De los corredores que sufrieron la caída, fue quien acabó peor. Evenepoel y Roglic parecen haber mandado un mensaje más tranquilizador tras lo ocurrido el pasado 4 de abril.
Se espera que su traslado hacia Dinamarca sea en un avión medicalizado en un plazo de 48 horas. Su mayor inconveniente estará en los problemas pulmonares que está atravesando ahora mismo debido a la caída. Fue operado además la semana pasada de su clavícula y se encuentra delicado para viajar. Por ello, los médicos de Visma y los doctores del hospital están en continuo contacto. Los doctores de su equipo desean trasladarle cuanto antes, pero los vascos no son partidarios de tomar riesgos innecesarios. La clave está en la afectación pulmonar y el neumotórax. Se están estudiando todas las consecuencias que podrían llegar a suceder en el caso de viajar en avión debido a su estado de salud.
Su propio equipo no ha dado muchos detalles durante el proceso de recuperación, más allá del parte médico tras su caída. Su recuperación será larga y hay quien habla de una posible retirada a sus 29 años debido a las lesiones sufridas.
El pasado jueves 4 de abril, en el tramo entre Etxarri y Legutio, Vingegaard sufrió una caída en Olaeta, en dirección a Cruceta. La curva carece de peralte adecuado, y el firme está lleno de raíces del bosque, lo que lo hace muy peligroso, y la velocidad a la que todos tomaron la curva fue excesiva. Se estima que Evenepoel se estrelló a una velocidad de 88,2 kilómetros por hora. El danés fue trasladado en camilla, con inmovilización y collarín, y necesitó oxígeno artificial. Su participación en el Tour podría estar en riesgo, aunque ahora mismo ese sea el menor de los problemas tanto para él como para su familia.