El LIV Golf ya ha dicho su última palabra esta campaña, y es que tras disputar la semana pasada su gran final individual en Chicago, donde Jon Rahm se impuso, conquistando la friolera de 22 millones de dólares al alzar el torneo y la clasificación general, ha tocado este fin de semana el evento decisivo por equipos. Pero esta vez bloque del jugador de Barrika, el Legion XIII, no ha podido hacer mucho debido a la ausencia de su estrella, aquejado de una gripe, lo que ha dado alas al Ripper, que se ha hecho con el trofeo y con un nada desdeñable premio monetario.
El bloque que encabeza el australiano Cameron Smith, una de las grandes estrellas del circuito saudí y que al igual que Rahm optó por aceptar la llamada de los petrodólares, dejando el PGA en su mejor momento, apenas unos meses después de ganar el Abierto Británico, se proclamó este domingo campeón de la final por equipos, que se celebró este fin de semana en Dallas.
Con Smith como capitán, el Ripper le brindó un gran triunfo al golf australiano ya que este equipo lo completan sus compatriotas Lucas Herbert, Matt Jones y Marc Leishman, tapando un año discreto en los grandes, pues muchas de las grandes esperanzas 'asussies' están puestas en su estrella, que al igual que le ocurre a Ramh, es de los que acusa más de la cuenta la baja competitividad semana a semana una vez que retorna al máximo nivel para los grandes. Eso sí, gracias a su victoria de este domingo, el Ripper se embolsó 14 millones de dólares de premio.
El Ripper acabó el domingo con 11 bajo par. En segundo lugar con -8 terminaron empatados los 4Aces del estadounidense Dustin Johnson y los Iron Heads del también estadounidense Kevin Na. En cuarto puesto quedó con -6 el Legion XIII, que firmó una meritoria actuación este fin de semana pese a no poder contar por una gripe con su capitán Jon Rahm. No obstante, ahora para el vasco solo le queda recuperarse, pero tiene que estar listo de cara en apenas tres días para la disputa, a partir de este jueves del Open de España en Madrid, donde regresa al circuito europeo, con el sueño de volver a ganar en casa, además de asegurar su clasificación para la Ryder Cup de 2025, donde tiene que volver a comandar a Europa, pero para asegurarlo aún le faltan un par de detalles.