Alvaro Arenillas5 min lecturaLa prueba reina del atletismo. El reto de los 42,19 kilómetros. Sí, el maratón es una carrera mítica ante la que hasta hace poco parecía imposible que el ser humano la pudiese completar en dos horas. Sin embargo, poco a poco –casi año a año– se han ido dando 'mordiscos' de segundos hasta que un hombre, exactamente Kelvin Kiptum, lo hizo realidad en la prueba de Chicago de 2023.
Lo más sorprendente del atleta keniano es que a diferencia de otros muchos plusmarquistas de la distancia él logró el récord a una temprana edad. Así, si Kipchoge tocó la gloria a los 38 años, Kiptum lo ha hecho con tan solo 23; es decir, cuenta con un enorme margen de cara a ir por el mayor reto de la historia del maratón: correrlo por debajo de las dos horas.
La realidad es que en la última década han sido muchos los atletas africanos que se han acercado a tal deseo. Ya en 2014 el también keniano Dennis Kipruto Kimetto firmó en Berlín una genial carrera de 2 horas 2 minutos y 57 segundos. Y es que esta es una prueba que dominan plenamente en África; tanto es así que desde 1998 no hay un atleta de otro país que haya tenido en su poder el récord. En aquel momento, hace ya 26 años, fue el brasileño Ronaldo Da Costa quien paró el crono en 2 horas, 6 minutos y 2 segundos.
Sólo un año y un mes después de que Kipchoge firmase el récord, llegó Kelvin Kiptum –también tuvo el récord de medio maratón– para recorrer las calles de Chicago el 8 de octubre de 2023 y lograr el récord mundial actual de maratón al detener el reloj en 2 horas y 35 segundos. El fantástico deportista italiano concluyó con un ritmo de 21 kilómetros por hora e hizo el último 10.000 en un tiempo espectacular de 28 minutos y 30 segundos. Fue una actuación épica que, como decíamos, abre la puerta a ver a alguien bajando de las dos horas.
En cuanto a bajar de las dos horas, lo cierto es que ya se ha hecho, pero no está homologado. Fue el propio Kipchoge quien en 2019 se calzó en Viena para completar la prueba en 1 hora, 59 minutos y 40 segundos; sin embargo, no consiguió que World Athletics (Federación Internacional de Atletismo) diese por bueno su tiempo en una carrera patrocinada por la propia empresa del calzado que usó y que se celebró con el único objetivo de que lograse tal hazaña. Además, contó en todo momento con un grupo de 'liebres' que le fueron ayudando casi hasta el final a marcar el ritmo que necesitaba.
El primer tiempo del que se tiene constancia son las 2 horas 55 minutos y 18 segundos que necesitó John Hayes en 1908 (Londres) para ser el primer plusmarquista de maratón. En los 116 años que han pasado hasta el presente, el tiempo de aquel estadounidense se ha visto recortado en 54 minutos y 43 segundos; es decir, hablamos de casi medio minuto de diferencia por año. Para los especialistas en este deporte, la mejora de la condición física del ser humano tiene mucho que ver con la aplicación de la tecnología en los entrenamientos y la preparación. Además, el material del calzado también marca una gran diferencia, y ahí también se ha mejorado enormemente.
Volviendo a la evolución del récord, y ciñéndonos al siglo XXI, entre el año 2000 y el 2024 la mejora ha sido de poco más que cinco minutos; es decir, el tiempo que se ha ido descontando con año ha bajado de ritmo para ponerse en algo menos de 15 segundos por año. En este siglo, el mayor lapso temporal entre un récord y otro ha sido de cuatro años. En el anterior, el XX, se llegaron a estar hasta 12 años sin que se pudiese bajar la anterior marca.