¡Enorme Carlos Rodríguez! Etapa de las que marcan época la que hemos vivido en el Tour de Francia con el ciclista de Almuñecar, que ha coronada la fantástica ronda gala que está realizando con un impresionante triunfo en la 14ª jornada; y no una cualquiera, sino una en los Alpes, con tres puertos de primer categoría y otro de categoría especial, para poner su nombre con letras de oro en la historia de la Grande Boucle llegando antes que dos colosos como Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard a la meta de Morzine. He aquí su triunfal llegada con brazos en alto, la cual le coloca tercero de la clasificación general con un segundo de ventaja sobre Jai Hindley.
Casi cuesta escribir. Ha sido un etapa agotadora, de las que ves que cada pedalada cuesta y de esas en las que hasta los espectadores acaban cansados al querer dar alienta a los ciclistas desde la cuneta –y desde sus casas–. Tal y como esperábamos en una jornada de alta montaña, Jumbo, equipo del maillot amarillo Jonas Vingegaard, no solo tomó el control de la carrera, sino que se propuso ir a un altísimo ritmo desde el inicio –bueno, el segundo inicio, ya que tras el primer una multitudinaria caída llevó a la organización a parar la etapa–.
Con la carrera reanudada tras los abandonos de Antonio Pedrero y Louis Meintjes, muchos corredores pelearon por dar forma a una escapada, pero Jumbo no les dejó. El equipo de los Países Bajos puso a todos sus hombres a tirar y poco después de iniciar la ascensión al penúltimo puerto del día ya no quedaba nadie por delante, lo que convertía la última subida al Joux Plane, en una auténtica batalla entre Vingegaard y Pocagar.
Y así fue. Jumbo empezó tirando, pero fue Adam Yates quien cambió el ritmo para quedarse junto a los dos primeros de la general. Los kilómetros pasaban y fue a cinco de meta cuando Pogacar lanzó su ataque. Vingegaard, al contrario de anteriores jornadas, no se cebó con su rueda y se mantuvo a unos pocos metros. Le salió bien la jugada, ya que no solo terminó por darle caza, sino que coronó la cota en primera posición.
Y sí, en estas el gran beneficiado fue Carlos Rodríguez, que fue recortando distancias con ambos hasta darles caza poco después de iniciarse el descenso. El andaluz, cuya lucha estaba en ganar la etapa y sacar el mayor tiempo posible a un Jai Hindley que iba por detrás, se lanzó con todo nada más alcanzarles y logró una distancia que le sirvió para coronarse con su primera victoria en el Tour. Mientras, Pogacar y Vingegaard llegaron juntos y el danés fue capaz de retener el amarillo.