Estadio Deportivo6 min lecturaMadrid, 26 abr (EFE).- Un total de 33.265 corredores, entre el maratón (9.466), el medio maratón (15.799) y los 10 km (8.000), aprovecharán este sábado la jornada de reflexión, en vísperas de las elecciones generales, para ocupar las calles de Madrid en la 42 edición de la carrera, que ostenta la etiqueta oro de la IAAF.
Los organizadores, de acuerdo con el Ayuntamiento, anunciaron el 19 de febrero que la carrera se adelantaba en un día para no coincidir con las elecciones, aunque mantuvieron el horario: la prueba de 10 kilómetros comenzará a las 8.00 horas y el maratón y el medio maratón a las 8.45.
El previsible colapso del centro de la capital durante seis horas -tiempo límite para completar el maratón-, ocupado por un largo rosario de corredores entre la salida en el Paseo de la Castellana y la meta en la Plaza de Cánovas del Castillo obligó al cambio de fecha y deparó el primer maratón madrileño sabatino.
Si el segoviano Javi Guerra, el mejor maratonista español de la actualidad con su marca de 2h08:36, no lo remedia -y la empresa es desesperada-, la victoria será para un africano, como ha ocurrido los diez últimos años en categoría masculina y los cinco últimos en la femenina.
Desde que el madrileño Chema Martínez se impuso en 2008 y la gallega -toledana de residencia- Vanessa Veiga venció en 2013, el historial del maratón madrileño sólo ofrece nombres africanos, en hombres y en mujeres.
Guerra hará su debut en Madrid. Será sólo su tercer maratón en España y el undécimo de su vida. Debutó en la distancia en La Coruña en 2013 y el 25 de febrero de 2018 se clasificó cuarto en Sevilla con un tiempo de 2h08:36, la mejor marca española en trece años, desde que el toledano Julio Rey -marido de Vanessa Veiga- estableció el vigente récord de España con 2h06:52 en Hamburgo.
En Madrid, Guerra lo tiene casi imposible. En la salida habrá dos atletas con marcas inferiores a 2h05: el etíope bronce mundial de 2013 Tadesse Tola (2h04:49), bronce mundial en Moscú 2013, y el keniano Bernard Kiprop Koech (2h04:53), y otros dos con menos de 2h07: los etíopes Seboka Dibaba Tola (2h06:17) y Sisay Jisa (2h06:27).
Pero también estarán los kenianos Reuben Kerio (2h08:12), Kipkemoi Kipsang (2h08:26) y Kiprotich Kirui (2h08:48) o el ugandés Timothy Toriotich, gran especialista en cross.
Entre las mujeres contendientes hay tres con marcas inferiores a 2h24, las tres etíopes: Askale Magarsa Tafa (2h21:31), Shasho Insermu (2h23:28) y Tinbit Weldegebril (2h23:37), tercera en Valencia 2018.
Junto a ellas la marroquí Kawtar Boulaid (2h25:35) que ya sabe lo que es ganar pruebas en España, como el Medio Maratón de Madrid (2016) o el Maratón de Sevilla (2018).
Los récords del maratón de Madrid están en poder de los kenianos Eliud Kiplagat Barngetuny (2h10:15 en 2018) -que también participará este sábado- y Valentine Jepkorir Kipketer (2h30:40 en 2018).
El Medio Maratón, que parte al mismo tiempo que la carrera larga y luego se bifurca, contará con cuatro españoles destacados. En categoría masculina, Carles Castillejo (1h01:18) y Juan Carlos De La Ossa (1h05:57), y en la femenina Diana Martín (1h13:19) y Núria Lugueros.
En la distancia de 10 kilómetros, que comienza a las 8.00, saldrán Marta Pérez, Irene Sánchez-Escribano (34:25) y Ana Lozano (35:33). En hombres el español con mejor palmarés de los participantes será el aragonés Carlos Mayo (29:15).
La carrera tuvo el pasado año un impacto económico de 39 millones de euros que crecerá en esta edición hasta los 43 millones, pese al cambio de fecha. El coste, según los organizadores, es de 1.900.000 euros, lo que supone que el retorno para la ciudad es de 22 euros por cada uno invertido.
La participación femenina asciende al 32 por ciento del total, aunque en la distancia de maratón el porcentaje se reduce al 14. Entre los inscritos, 23.000 españoles y 9.000 extranjeros, procedentes de 126 países -récord-, la mayoría franceses, británicos e italianos.
Un contingente de 1.500 efectivos entre policías municipales y agentes de movilidad, vigilantes de seguridad y sanitarios de Samur y Protección Civil, se ocuparán de proteger a los corredores, junto a otros 1.500 voluntarios.
Los ciudadanos madrileños habrán de armarse de paciencia para hacer frente a los cortes de tráfico dispuestos en el plan de movilidad elaborado por el Ayuntamiento de Madrid, que afecta especialmente, ya desde este viernes, al eje Paseo del Prado-Cibeles-Castellana-Colón.
El maratón madrileño se ha dotado este año de un barniz cultural. Reproducciones de cuadros de Velázquez, Goya, El Greco, Tiziano o Rubens que se exponen en el Museo del Prado jalonarán los 42 kilómetros del Maratón, que de esta forma se suma a las celebraciones del 200 aniversario de la pinacoteca madrileña, junto a la cual estará situada la meta.