Jon Rahm comienza esta semana en Dubai su temporada en un DP World Tour que le servirá para preparar su segundo año en el LIV Golf, cuyo circuito arranca a principios de febrero.
El golfista español participa junto a otras estrellas, entre las que destaca el norirlandés Rory McIlroy, en el Hero Dubai Desert Classic, séptimo evento de la temporada del antiguo Circuito Europeo que reparte 9 millones de dólares en premios.
Rahm se haya totalmente centrado en un año en el que quiere mejorar todo lo vivido en 2024. Entonces, todo lo que se movió tras su fichaje por el LIV Golf le impidió rendir como esperaba en el arranque del año y, aunque siempre estuvo entre los mejores, no fue hasta julio cuando empezó a ser él mismo y pudo al fin ganar torneos. Eso le permitió liderar a final de año este circuito y llevarse el premio gordo. Pero, para entonces, ya se habían jugado tres de los cuatro Majors y Rahm no había estado a la altura.
Por eso, este año ha adelantado su arranque y comenzará en los Emiratos Árabes. Por delante le espera el reto de volver a ganar el LIV Golf y de participar en la Ryder Cup, pues ya cumple con lo exigido por el DP World Tour y sólo hace falta convencer con su juego al capitán del conjunto europeo, Luke Donald.
Mientras, siguen entre bastidores las negociaciones para que la llamada 'guerra del golf' acabe. Todo parecía encaminado en los últimos meses de 2024, pero de momento no hay acuerdo. Hay gestos, como el hecho de que el PGA Tour permitiera al capitán americano de la Ryder Cup que convoque también a golfistas del LIV Golf. Sin embargo, otros apuntan a lo que le esperaría a Jon Rahm si decide dar marcha atrás para volver a jugar el circuito americano.
El español Eugenio López-Chacarra, quien este año se ha desvinculado del LIV Golf para volver a jugar el circuito europeo, ha desvelado en una entrevista con Elperiodigolf la sanción que le ha caído por parte del PGA Tour por haber jugado en el circuito saudí. "Tengo una sanción y hasta el 23 de septiembre de 2025 no podré competir en ningún evento bajo el paraguas del PGA TOUR ni en ninguna previa", señalaba ell golfista español.
La sanción es de un año, ya que su último torneo en el LIV Golf es de esa fecha, por lo que ya sabe Jon Rahm lo que tendría que sufrir en el caso de querer volver a jugar en el circuito norteamericano: un año de sanción.
No parece previsible que eso vaya a ocurrir a corto plazo, pues tiene cuatro años más de contrato con el LIV Golf, y espera que mucho antes de que llegue ese momento todo se arregle y el mundo del golf vuelva a la normalidad.