Nacho Cartes3 min lecturaQuedan solo 29 días para que comience el Tour de Francia de 2023. Evento que empezará en Bilbao el próximo día 1 de julio y que está señalado en rojo en la cabeza de Tadej Pogacar. El ciclista esloveno lo ha ganado en dos ocasiones, pero la temporada pasada sucumbió (fue segundo) ante el poderío de Jonas Vingegaard y el Jumbo Visma. Aún así, este año volvía a ser el gran favorito, su comienzo de temporada fue brillante ganando allí por donde pasaba. Además, haciéndolo de forma brillante, con una superioridad muy poco habitual en este deporte.
Pero todo cambió a finales del pasado mes de abril cuando se fracturó la muñeca izquierda tras una caída en la Lieja-Bastogne-Lieja. Desde ese momento su gran preocupación era poder estar en el Tour y hoy tras bastante secretismo ha hablado con L'Equipe. Por cierto, está entrenando en Sierra Nevada: "He estado entrenando bastante bien, haciendo el entrenamiento en casa y corriendo, y esta semana he vuelto a la bicicleta de carretera. No estoy tan mal como pensaba. Mi muñeca mejora día a día. Ya no me duele, pero acabo de volver a entrenarme en carretera, así que sigo siendo prudente", aseguró.
Además, fue muy claro al hablar de si llegará bien su muñeca a la prueba francesa: "La muñeca puede que no, pero las piernas sí", aseveró con la misma ambición de siempre a pesar de seguir recuperándose. Tadej Pogacar solo tendrá un par de carreras antes de la ronda gala. La contrarreloj en el Campeonato Nacional de Eslovenia y la prueba en ruta, 24 y 25 de junio, serán sus dos mejores entrenamientos antes de comenzar el Tour. Mientras tanto estará en las concentraciones y hará algún reconocimiento de etapa. Por ahora, seguirá unos días en Granada preparándose en altitud.
Entre risas, el joven ciclista confesó que fue "un poco estúpido por desobedecer las órdenes del médico" ya que debería haber esperado seis semanas antes de volver a empezar, pero solo piensa en un Tour de Francia que este año tendrá un gran comienzo. Las dos primeras etapas serán montañosas, ambas se celebrarán en el País Vasco: "Serán magníficas, muy duras. Creo que prefiero eso a las etapas llanas de las primeras semanas. Hay menos estrés, ya puedes ver quién está en forma y quién no. Me gusta que las grandes vueltas empiecen así", concluyó Tadej Pogacar. Un ciclista que ya no puede pensar en otra cosa que no sea el Tour de Francia y del que sabemos que llegue como llegue con él sobre la bicicleta el espectáculo estará asegurado.