El 2024 el mundo del pádel ha vivido el estreno de un circuito como el Premier Padel que por primera vez se situaba como la referencia de este deporte tras varias campañas compartiendo protagonismo con el World Padel Tour, pero también ha servido para decir adiós a algunos referentes que han decidido colgar la pala tras muchos años de éxitos. Y en esas no queda otra que señalar al que probablemente es el más grande la historia, Fernando Belasteguín, que tras décadas de una carrera de leyenda, dijo adiós en el P1 de Milán. Sin embargo ahora, unas semanas después del final, una leyenda máxima, en este caso de la categoría femenina, como Carolina Navarro, ha anunciado que el 2025 será su final.
La jugadora malagueña y que actualmente compite con Suecia por su madre, ha sido triple campeona del mundo con España y una de las mayores figuras del circuito profesional de este deporte. Pero este jueves ha sido el día elegido para anunciar en un comunicado su retirada a finales de 2025 y que la próxima temporada será la última en su carrera. Navarro, de 48 años, ha destacado entre las mejores jugadores durante nueve temporadas en el circuito World Pádel Tour y esta última temporada ha estado presente en previas y rondas iniciales del Premier Padel, acusando el inexorable paso del tiempo.
Así lo ha anunciado en sus redes sociales: "Tengo algo importante que contarte, 2025 va a ser mi último año como jugadora profesional de este deporte que me lo ha dado todo. He podido vivirlo desde sus inicios, con palas de madera y pistas de muro. Y ver en lo que se ha convertido hoy en día, jugando en estadios hasta como el de Roland Garros". Navarro, que ha impulsado el proyecto de inclusión 'Palas para Todos', destacó que "gracias al pádel" ha podido conseguir cosas que nunca se "hubiera imaginado, como campeonatos del mundo" o su "escuela de pádel adaptado".
"En 2025 voy a disfrutar cada torneo y voy a pelear cada partido como si fuera el último. Como he hecho toda mi vida". Pero eso sí, pese a la tristeza de la despedida, la andaluza aseguró que se va "muy tranquila" y sabiendo que ha "dado todo lo que tenía y que ha exprimido al máximo cada momento en pista". "No lo veo como un final, sino como el comienzo de algo nuevo, pero aún espera un año emocionante".
Carolina Navarro se va como una heroína y no sólo por lo que ha logrado, sino porque lo ha hecho tras superar sendas roturas de ligamento cruzado anterior de ambas piernas. Ya en 2001 recibía la Medalla bronce de la Real Orden al Mérito deportivo español y han tenido que pasar 24 años más para que se decida a dejarlo y lo haga como una leyenda como pocas hay en el olimpo de este deporte, que está en pleno crecimiento gracias a presencias como la suya.