El tenista español
Roberto Bautista se ha impuesto este sábado en el duelo fratricida ante
David Ferrer (7-5, 6-7(6), 7-6(3), 6-4) para avanzar a octavos de final del
Abierto de Australia, primer 'Grand Slam' de la temporada, ronda en la que no estará
Pablo Carreño, que ha caído ante el uzbeco
Denis Istomin (6-4, 4-6, 6-4, 4-6, 6-2).
Bautista, número 14 del mundo, y
Ferrer, 23º del ranking ATP, ofrecieron un duelo frenético, lleno de alternativas e igualdad, que sólo se resolvió tras más de cuatro horas de juego. El castellonense, ahora, se enfrentará al canadiense
Milos Raonic, que se impuso al francés
Gilles Simon (6-2, 7-6(5), 3-6, 6-3).
El alicantino comenzó cediendo su primer saque, pero respondió con un 'contrabreak' para neutralizar el tropiezo inicial. Tras ello, consiguió defender hasta tres bolas de rotura en contra, pero nada pudo hacer en el undécimo juego, en el que
Bautista logró romper y llevarse el primer parcial.
La segunda manga, tras un quiebre para cada jugador, tuvo que decidirse en el 'tie-break', en el que
Ferrer igualó la contienda, un camino que se repitió de manera idéntica en el tercer set, resultando esta vez ganador el castellonense en la muerte súbita.
El errático cuarto parcial se decantó en favor de Bautista, que logró quebrar el servicio de
Ferrer en tres ocasiones -por dos del de Jávea-. Con ello, el número 14 del mundo se cuela en la segunda semana del 'grande' de Melbourne, que comenzará ante
Raonic, tercero del ranking ATP.
Mientras,
Pablo Carreño sucumbió ante el uzbeco
Denis Istomin (6-4, 4-6, 6-4, 4-6, 6-2). El asturiano, número 31 del mundo, perdió el primer set tras ceder su saque en una ocasión, y se llevó el segundo tras devolverle la jugada a Istomin en el quinto juego.
Dos nuevos quiebres en contra -por uno de su contrincante- le hicieron caer en la tercera manga, pero forzó el quinto parcial al romper al uzbeco en el tercer juego del cuarto set. En el quinto, dos quiebres de Istomin en el sexto y el octavo juegos cerraron el duelo tras tres horas y media de juego.
En la competición femenina, la número dos del mundo, la estadounidense
Serena Williams, no tuvo problemas para deshacerse de su compatriota
Nicole Gibbs (6-1, 6-3), ante la que materializó cinco roturas y sufrió sólo un 'break' en contra para cerrar el encuentro en poco más de una hora.