La pensión pública es la única fuente de ingresos para siete de cada diez mayores de 65 años en
España y solamente un 30% cuenta con ingresos alternativos que provienen de productos financieros (29%), planes de pensiones (22%) y alquileres (13%), según revela el informe 'La revolución de la longevidad y su influencia en las necesidades de financiación de los mayores'.
Según este estudio, realizado por expertos de las universidades de Valencia, Extremadura y Castilla-La Mancha, un 67% de ciudadanos mayores de 65 años percibe unos ingresos mensuales por debajo de los
1.250 euros y hasta un 38% vive cada mes con unos ingresos que no llegan a los
750 euros. Solo un 6% supera los 2.000 euros mensuales, siendo las personas que tienen fuentes de ingresos alternativas a la pensión pública las que principalmente tienen más ingresos.
Estos datos toman más relevancia cuando se observa que los mayores de 65 años que residen en sus hogares tienen un
gasto medio mensual de 953 euros. A ello se le suma, tal y como sostienen los autores del informe, que la revalorización anual de las pensiones será inferior al crecimiento de los precios, derivando en una pérdida de poder adquisitivo para los pensionistas en sus últimos años de vida.
En este sentido, el equipo investigador ha creado un simulador que permite determinar, en base al perfil de gastos e ingresos de una persona, qué situación económica tendrá a partir del día de su
jubilación. A modo de ejemplo, un joven que hoy tiene 27 años y unos ingresos de 20.000 euros netos anuales, percibirá una pensión pública que solo cubrirá la totalidad de sus necesidades durante los dos años posteriores a su jubilación.
También se observa que un 56% de las personas mayores de 65 años prefiere ahorrar por si tiene que afrontar algún imprevisto. Eso sí, el 40% señala que no puede hacerlo porque carece de ingresos suficientes.
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